En la lección, la información que debes conocer está escrita en letra normal, y lo que se recomienda decir o leer en voz alta a los niños está en negrita. Todos los recursos para cada lección, incluyendo la Guía para el Maestro, la Página del estudiante, la Tarjeta de conexión familiar y otros materiales, pueden descargarse en un archivo ZIP haciendo clic en el siguiente enlace:
En algunas lecciones encontrarás "Artículos de recurso". Estos son textos escritos por expertos de todo el mundo que ayudan a los maestros en su labor con niños y adolescentes. Pueden compartirlos con padres o tutores si lo consideran apropiado.
Porque yo soy el Señor, tu Dios, que sostiene tu mano derecha; yo soy quien te dice: “No temas, yo te ayudaré”.
Isaías 41:13
Puede que estés cercano alguien que está lleno de enojo, alguien cuya rabia se apodera de ti y causa temor, dolor e ira a tu vida. Quizás sientes que las decisiones enojadas de la persona determinan tus acciones y emociones, que exprimen tu gozo y paz y te dejan impotente. ¿Excusas a la persona que te maltrata? ¿luchas para esconder el dolor causado por la rabia de otros? ¿vives atemorizado del próximo episodio de palabras airadas o abuso físico? o ¿golpeas de vuelta con tu propia ira para así recuperar el control?
Dios conoce tu temor y dolor. Sabe los secretos que guardas y las excusas que pones. Entiende el temperamento que luchas para controlar. Su amor es más poderoso que cualquier emoción humana. Él puede traer paz a tu vida si pones la situación en Sus manos. Entonces cuando la ira de otros amenaza con apoderarse de ti, camina con Dios. Deja que “sostenga tu mano derecha”. No hay nada que temer. Él es el único que te ayudará siempre. Traerá paz a tu corazón incluso cuando aquellos que te rodean son vencidos por la rabia.
Ánima a los adolescentes a preguntarles a los miembros de sus familias: “¿qué te hace enojar? ¿qué te hace sentir mejor cuando estas enojado?” Después pueden compartir que tratar a las personas enojadas con amabilidad es la mejor forma de resolver una situación de ira. Si es posible, haz copias del Artículo de Recurso.
Consejo para el docente: Si es posible, envíe por correo electrónico o mensaje de texto la tarjeta de conexión familiar a las familias de sus estudiantes.
Saluda a los adolescentes a medida que llegan, invítales a compartir algo que aprendieron en cuanto al manejo de la ira. Pueden compartir con otros estudiantes o con el grupo. Anímalos mientras comparten, y felicítalos por sus éxitos
Piensa sobre todas las formas en que somos similares y también diferentes el uno del otro. Dios nos hizo a cada uno de nosotros especiales y únicos. Pero hay cosas que nos conectan, características comunes que nos unen a un grupo o intereses en común, que nos ayudan a hacer amigos. Exploremos esta idea ahora.
Tendrás tres minutos para encontrar a cuatro personas diferentes quienes son similares a ti. Encontrarás dos personas que tengan un atributo físico similar al tuyo. Por ejemplo, si tienes una nariz pequeña, tendrás que encontrar a otras dos personas que tengan narices pequeñas.
También tendrás que encontrar a dos personas diferentes que compartan un interés en común contigo. Por ejemplo, si disfrutas contar chistes, deberás encontrar a dos personas que también gocen de hacerlo.
Da tres minutos a los estudiantes para encontrar a estas personas similares. Después pídeles que se sienten.
Pide a los estudiantes que compartan algunas de sus similitudes.
Las personas que son físicamente similares fueron más fáciles de encontrar porque podías saber con solo mirarlos. Las otras fueron más difíciles ya que involucraban conocer más del otro.
Encontrar a gente con intereses en común significó que tuviste que aprender sobre otros de una manera nueva. Hubo que mirar más allá de lo que veías. Te viste obligado a hablar con la otra persona y encontrar cosas que tenías en común.
Fue agradable hablar entre nosotros. Pero en la vida podríamos necesitar pasar tiempo con otras personas, cuando no es grato estar cerca de ellas. A menudo, esta es la gente enojada.
Comparte las siguientes ideas si los estudiantes no las mencionan: puedes tratar de evitar a esa persona debido a que derrama su ira sobre ti. Si frecuentemente la persona es violenta, podría asustarte. Si hiciste algo para enojar a la persona, quizás te sentirás culpable y avergonzado cuando la veas.
Permite que los estudiantes compartan lo que piensan.
Cuando la situación se vuelve amenazante, o es abusiva verbal o físicamente.
Algunos estudiantes pueden querer ser tratados con honestidad y confrontados con su ira. Otros podrían esperar paciencia.
Hemos aprendido cómo la ira es una taza que está llena hasta arriba. Cuando alguien está enojado, sus emociones pueden desbordarse hacia otros. Algunas veces las personas se enojan para poder sentirse mejor por las cosas malas que suceden en sus vidas. En una lección anterior, aprendimos sobre las maneras para evitar dejar que nuestra ira se derrame a otros.
Pero algunas personas no saben cómo controlar su ira. Algunas viven vidas enojadas y no aprendieron a controlar su rabia.
Como puedes ver, muchos de nosotros pasamos tiempo alrededor de personas enojadas. Hoy aprenderemos qué hacer y qué no hacer cuando estamos con este tipo de gente.
Imagina que estas en esta situación con una persona enojada.
El padre de Natalia falleció hace poco. Desde entonces, ella está enojada y grita sin razón. Empuja a los demás en la clase y no muestra respeto por el profesor. Es grosera y está encolerizada con todos. Evitas hablar con ella ya que solo te habla a gritos. Cuando lo hace, le gritas o le dices que se calme. Tú y tus amigos se burlan de ella y la insultan.
La traté con enojo y falta de amabilidad.
No fueron efectivas porque la ira solo causa más ira.
Deja que los estudiantes ofrezcan sus sugerencias. Pueden incluir: podría haberla consolado, hablado de buena manera o haberle mostrado amabilidad.
Imagina que te encuentras en otra situación.
Los padres de Pedro son alcohólicos. Cada vez que toman, discuten y lo golpean. Pedro debe trabajar para ayudar a alimentar a su familia, porque ellos gastan todo su dinero en alcohol. Él parece estar enojado todo el tiempo. A menudo tiene dolores de cabeza que vienen por reprimir su ira. Frecuentemente tiene hambre, entonces a menudo compartes el almuerzo con él. Sabes que Pedro está sufriendo. A pesar de que eres amable, a veces él explota con problemas pequeños. Cuando se enoja, le das tiempo para que se calme. Oras por Pedro y tratas de ayudarlo cuando puedes. Lo perdonas por su ira y le haces saber que te preocupas por él. Aunque algunas veces se muestra enojado contigo, Pedro te dice que eres su único amigo y la única persona que entiende sus problemas.
Fui amable y paciente con él. Traté de entender sus problemas. Lo perdoné porque sabía que sufría.
Fueron efectivas porque sintió que podía confiar en mí como su amigo.
Permite que los estudiantes ofrezcan sus sugerencias.
En ambas de estas situaciones, fuiste afectado por la ira de tu amigo. Esos amigos no están enojados contigo, pero su rabia causó que te respondieran de maneras enojadas.
Tratar a Pedro con amabilidad funcionó mejor que lidiar con Natalia con crueldad.
Como ya descubriste, tratar a los demás con amabilidad puede ser una forma buena de lidiar con su enojo. Escucha este sabio consejo de Proverbios, en la Biblia.
Si es posible, haz que tres estudiantes lean estos versículos desde la Biblia.
Opcional: Si es posible, comparte la imágen de La Biblia en Acción.
La respuesta amable calma el enojo, pero la agresiva echa leña al fuego.
Proverbios 15:1
El que es iracundo provoca contiendas; el que es paciente las apacigua.
Proverbios 15:18
No te hagas amigo de gente violenta, ni te juntes con los iracundos.
Proverbios 22:24
Las respuestas podrían incluir: no debemos responder al enojo con más ira. Debemos tratar de estar calmados. Tenemos que tratar de evitar hacer amistad con aquellos que siempre están enojados.
Las respuestas podrían incluir: Memorizar Proverbios 15:1 como un recordatorio. Orar antes de responder y orar por la persona. Tratar de entender las cosas difíciles que pueda estar atravesando la persona.
Hay varias cosas que no debieras hacer cuando tratas con alguien que está enojado.
No le digas a la persona que está enojada o trates de calmarla. A menudo esto la enojará más.
No intentes tocar a la persona a menos que te invite a hacerlo. Incluso un abrazo puede enojar más a la persona.
No te expongas a una situación peligrosa. Si te sientes inseguro, vé a un lugar seguro y cuéntale a un adulto de confianza.
No aceptes la culpa del enojo de la persona si no hiciste nada malo.
Cuando, frecuentemente, pasas tiempo con una persona enojada, te puede afectar de diferentes maneras. Es posible que te haga reaccionar con ira también, como vimos con Natalia y Pedro. También quizás te provoque baja autoestima, ansiedad, depresión y temor. Estar con gente enojada puede hacer que sea difícil formar relaciones de confianza. Sin embargo Dios es capaz de ayudarte a superar estas cosas, incluso si estás en una relación difícil con una persona enojada.
Piensa en un tiempo cuando te encontraste con una persona encolerizada.
Permite que los estudiantes compartan sus pensamientos.
Hemos considerado algunas cosas que no debemos hacer cuando tratamos con una persona enojada. Aquí hay algunos consejos buenos para poner en práctica cuando estés cerca de una persona encolerizada. Quizás no siempre puedas ser capaz de realizar estas cosas, y es probable que no funcionen todo el tiempo, pero pueden ser de ayuda.
Darle tiempo a la persona para que controle su ira. Algunas necesitan tiempo a solas para calmarse.
Tratar de permanecer calmado. Esto evitará que la situación empeore. También podría ayudar a la persona enojada a tranquilizarse.
Alejarse. Si la persona enojada te está abusando física o verbalmente, trata de retirarte de la situación.
Aceptar que no puedes controlar la ira de la otra persona. Sin importar sí es un adulto que está enojado o tu amigo, no puedes cambiar cómo la persona se comporta.
Medita de nuevo sobre una persona con ira en tu propia vida. Pregúntate a ti mismo: ¿Piensas que estas cosas te ayudarían a tratar con esa persona?
Probablemente tú no eliges pasar tiempo con gente enojada. No puedes controlar la ira de las otras personas y tampoco eres responsable por ella. Sin embargo, puedes controlar la forma que tú reaccionas a su enojo. En su lugar, puedes escoger controlar tu propia ira y reaccionar con entendimiento o tolerancia. Esto es más seguro para ti y a menudo puede llevarte a un mejor resultado.
Practiquemos cómo responder a personas enojadas mediante la utilización de lo que hemos aprendido.
Haz que los estudiantes se junten en pares. Recuérdales las situaciones hipotéticas del principio de la lección.
El padre de Natalia falleció hace poco. Desde entonces, ella está enojada y grita sin razón. Empuja a los demás en la clase y no muestra respeto por el profesor. Es grosera con todos.
Los padres de Pedro son alcohólicos. Cada vez que toman, discuten y lo golpean. Pedro debe trabajar para ayudar a alimentar a su familia, porque ellos gastan todo su dinero en alcohol. Él parece estar enojado todo el tiempo. A menudo tiene dolores de cabeza que vienen por reprimir su ira, y frecuentemente tiene hambre. Él explota con problemas pequeños. Sabes que Pedro está sufriendo.
Pide a cada par de adolescentes que utilice una de las situaciones para practicar lidiar con gente enojada de forma efectiva. Uno de los compañeros en cada par debe ser Natalia o Pedro, y el otro el amigo. Dales dos o tres minutos para representar cómo tratar con amabilidad a las personas enojadas. Después pídeles que cambien de roles y realicen la actividad de nuevo. Dales otros dos o tres minutos para hacerlo.
Después de que los pares hayan terminado, junta al grupo. Selecciona a tres estudiantes para representar la situación de Pedro y sus padres, para toda la clase. El estudiante que interprete a Pedro debe usar algunos de los consejos para tratar de ayudarle a lidiar con sus padres enojados. Luego de dos o tres minutos, haz que toda la clase los aplauda. A continuación pregúntales:
Aun cuando uses las ideas de las que hablamos, tratar con gente enojada es difícil. Sin embargo, no tienes que hacerlo solo. Cuando necesites interactuar con alguien así en tu vida, puedes pedirle ayuda a Dios. Él caminará contigo en los momentos difíciles.
Pide a un estudiante que lea Isaías 41:13 en voz alta y desde la Biblia. Si utilizas el Cartel del Versículo para Memorizar, muéstralo a los estudiantes.
Porque yo soy el Señor, tu Dios, que sostiene tu mano derecha; yo soy quien te dice: “No temas, yo te ayudaré”.
Isaías 41:13
Los estudiantes pueden responder que Dios está con ellos, sostiene sus manos en tiempos de temor y problemas.
Los estudiantes pueden responder que claman a Dios para que los ayude a lidiar con gente encolerizada.
Dios puede ayudarte a permanecer calmado y respetuoso cuando tratas con una persona enojada. También puede ayudar a la persona a resolver el asunto que le causa ira. De la misma forma tiene el poder para ayudar a la persona a ver que su comportamiento airado no es de ayuda.
Como hemos aprendido, Dios entiende el enojo de la gente, pero no quiere que tome el control de nuestras vidas. No importa lo que causa la ira, puede ayudar a la persona enojada a controlarla. Tiene el poder para ayudarnos a responder con amabilidad y respeto.
Corta los versículos incluye con esta lección y léelos en voz alta. A medida que lees cada uno, colócalos en un área diferente del espacio de reunión.
La respuesta amable calma el enojo, pero la agresiva echa leña al fuego.
Proverbios 15:1
El que es iracundo provoca contiendas; el que es paciente las apacigua.
Proverbios 15:18
No te hagas amigo de gente violenta, ni te juntes con los iracundos.
Proverbios 22:24
Piensa en una persona enojada en tu vida. ¿Qué versículo crees que te ayudará en esa situación? Mientras leo cada versículo de nuevo, dirígete al área donde he puesto ese versículo.
Lee los versículos en voz alta de nuevo y señala dónde pusiste cada uno de ellos. Da a los estudiantes alrededor de un minuto para moverse a las diferentes áreas del salón.
Una persona, en sus grupos, leerá el versículo en voz alta. Después hablen sobre lo que hace que este versículo sea significativo para ustedes. Comenten acerca de cómo aplicarlo a su situación. Luego cada persona en el grupo ofrecerá una palabra de ánimo, dirá el versículo con sus propias palabras, o una oración. A medida que se animan y oran los unos por los otros, se darán cuenta de que tienen apoyo y ayuda al tratar con gente enojada en sus vidas. Dios quiere que tengan a otros que los entiendan.
Dales cuatro o cinco minutos para hablar, animarse, y orar mutuamente. Observa a los grupos, y ayuda según sea necesario.
Opcional: Si usas las Páginas del Alumno, los adolescentes pueden completar sus hojas en este tiempo.
Cierra la clase con esta bendición basada en Deuteronomio 31:8.
Bendición: Que busques la paz en como reaccionas con otros. Que nunca te desanimes, incluso si estás rodeado con gente enojada, porque Dios nunca te dejará. Nunca te abandonará. Va delante de ti. Puedes seguir Su guía.
Si tienes tiempo, comparte esta canción con los estudiantes como un recordatorio de que Dios siempre es digno de alabanza.
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