En la lección, la información que debes conocer está escrita en letra normal, y lo que se recomienda decir o leer en voz alta a los niños está en negrita. Todos los recursos para cada lección, incluyendo la Guía para el Maestro, la Página del estudiante, la Tarjeta de conexión familiar y otros materiales, pueden descargarse en un archivo ZIP haciendo clic en el siguiente enlace:
En algunas lecciones encontrarás "Artículos de recurso". Estos son textos escritos por expertos de todo el mundo que ayudan a los maestros en su labor con niños y adolescentes. Pueden compartirlos con padres o tutores si lo consideran apropiado.
Jesús se acercó entonces a ellos y les dijo: —Se me ha dado toda autoridad en el cielo y en la tierra.
Mateo 28:18
Puede ser difícil someterse a la autoridad de otros, especialmente a aquellos que creemos que son corruptos o abusivos. Cuando vemos que los que están en el poder no protegen los derechos de las personas que lideran, podemos sentirnos engañados, enojados y traicionados. Queremos que cambien, y pensamos que lo harán si hablamos y actuamos en su contra. Anhelamos justicia.
La Biblia nos dice en 1 Pedro 2:12–14 que debemos vivir de tal manera que llevemos a los demás a glorificar al Señor del cielo y de la tierra, y someternos a todas las autoridades terrenales. Si nos sometemos primero a la autoridad del Rey supremo, Él nos ayudará a someternos a las otras autoridades, incluso a aquellas con las que no estamos de acuerdo o con las que tienen comportamientos deshonrosos. Nuestro objetivo máximo no debe ser cambiar nuestra sociedad, sino honrar al Señor en medio de un mundo quebrantado y caído.
Piensa en un líder de tu comunidad o país y comprométete a orar por esa persona a diario. Compórtate de tal manera que lo honres, honrando de esta manera al Rey de Reyes. Permite que los demás vean a Cristo trabajando en tu vida. Toda autoridad en el cielo y en la tierra pertenece a Él, y sus propósitos son siempre buenos para ti.
Anima a los estudiantes a preguntarles a los miembros de su familia: – ¿Quién es el líder más honorable que conoces? ¿por qué lo respetas? Luego pueden compartir que honrar a aquellos en autoridad nos ayuda a vivir en paz.
Consejo para el docente: Si es posible, envíe por correo electrónico o mensaje de texto la tarjeta de conexión familiar a las familias de sus estudiantes.
Da la bienvenida a tus estudiantes a medida que van llegando. Pide a cada uno que comparta una cualidad positiva de alguien de su familia. Si tienes un grupo grande o no tienes tiempo para hablar con cada uno de forma individual, invítalos a compartir con otro estudiante.
Realicemos un juego. Te daré un orden y la harás. Si no haces lo que te digo, estás fuera del juego.
Comienza dando órdenes fáciles a los estudiantes, dejando tiempo suficiente entre ellas para que completen las acciones. Puedes dar cualquier orden fácil que sea apropiada para tu grupo, y también usar la misma más de una vez. Después de unas pocas órdenes, apresúrate y dales las instrucciones de manera más rápida. Aquí hay algunas ideas de órdenes.
Continúa jugando por 1 o 2 minutos. Después de detener el juego selecciona a 5 voluntarios y haz que se ubiquen en diferentes áreas cerca de los límites exteriores de la sala de clases.
Ahora jugaremos de nuevo, pero esta vez los voluntarios te dirán qué hacer. Cada vez que señalo a un voluntario, él dará una orden para que la cumplas. Si no haces lo que dice, estás fuera del juego.
Hagan el juego de nuevo, pero esta vez los voluntarios darán las órdenes. Señala al primer voluntario. Él dará una orden. Dales bastante tiempo a los estudiantes para que hagan las acciones. Después de que todos hayan terminado, señala a otro voluntario. Repite el proceso 2 veces más. Puedes señalar a los voluntarios en cualquier orden, y el juego será más difícil si los eliges en orden aleatorio. Primero, será fácil completar las instrucciones. Después lo dificultarás acelerando la velocidad del juego. Señala a los voluntarios más rápidamente cada vez hasta que las órdenes sean tan rápidas que los estudiantes no puedan hacerlas. Aún puedes señalar a 2 voluntarios a la vez para que escuchen 2 órdenes al mismo tiempo. El juego se acaba cuando queda solo un estudiante en el juego.
Como vieron en nuestro juego, los líderes son importantes. Mantienen a nuestra comunidad funcionando bien. A menudo los líderes hacen reglas o leyes para mantener la paz y la seguridad en una comunidad. Pueden ayudar a las personas a resolver asuntos y conflictos y trabajar para prevenir determinados problemas.
Permite que los estudiantes compartan sus ideas.
Sin líderes que establezcan leyes y reglas, siempre viviríamos en temor. Tendríamos miedo porque todos solo protegerían sus propios intereses. La persona más grande, fuerte o más poderosa estaría en control. Y haría solo lo que fuera mejor para él y para sus seres queridos. Sin embargo, se supone que los líderes nos ayudan a vivir de una manera segura y en paz. Ellos deben proteger a cada persona en la comunidad.
Muchos líderes son personas correctas, con un alto valor moral, que quieren servir a su comunidad. Entienden la importancia de un buen liderazgo y quieren ayudar a sus comunidades. Otros pueden usar su autoridad para servirse a sí mismos en vez de servir a los demás. Hoy hablaremos sobre cómo podemos honrar a ambos tipos de líderes.
La semana pasada aprendimos sobre cómo honrar a nuestros padres. ¿Qué significa la palabra “honra”?
Repasa con los estudiantes que “honra” quiere decir respeto debido a la posición de alguien, no por lo que hace o quién es como persona. La honra se muestra a través de nuestras palabras, actitudes y acciones.
Tus familiares mayores, tales como tus padres, abuelos, tíos y tías, tienen autoridad sobre ti. Establecen reglas que tienes que seguir. Cuando las respetas, eso te ayuda a mantener el orden en tu casa. Cuando no las sigues, puede causar conflictos.
Permite que los estudiantes compartan sus pensamientos. Si no los mencionan, ofrece estas ideas: los padres y otros miembros de la familia, el gobierno y los líderes de la comunidad, los líderes de la iglesia, la gente mayor, los supervisores del trabajo y los profesores.
Permite que los estudiantes compartan lo que piensan. Pueden ofrecer sugerencias como ser educado cuando hablan con alguien en autoridad, obedecer las reglas y leyes, y tratar de hacer lo mejor por la comunidad.
A veces quienes están en autoridad toman decisiones con las que no estamos de acuerdo. Puede que lo hagan porque consideran las necesidades de diferentes grupos de personas. O quizás tienen más información sobre la situación. A lo mejor tienen diferentes creencias o principios que nosotros. Puede que no sepamos o entendamos sus razones. Cuando los líderes toman decisiones con las que no estamos de acuerdo, podemos encontrar más difícil honrarlos.
Permite que los estudiantes compartan sus pensamientos. Diles que no compartan sobre líderes específicos, sino que hablen de los líderes en general.
Escucha lo que dice la Biblia sobre honrar a los líderes.
Haz que un estudiante lea 1 Pedro 2:13–15, 17 en voz alta y desde la Biblia.
Sométanse por causa del Señor a toda autoridad humana, ya sea al rey como suprema autoridad, o a los gobernadores que él envía para castigar a los que hacen el mal y reconocer a los que hacen el bien. Porque esta es la voluntad de Dios: que, practicando el bien, hagan callar la ignorancia de los insensatos. Den a todos el debido respeto: amen a los hermanos, teman a Dios, respeten al rey.
1 Pedro 2:13–15, 17
Los líderes están puestos en posiciones de autoridad para ayudarnos a hacer lo correcto y protegernos de aquellos que no toman decisiones seguras y sabias. Los líderes rectos y con una moral alta consideran los intereses de muchas personas cuando deciden. Toman decisiones basadas en las necesidades de toda la comunidad en vez de pensar solamente en unos pocos individuos. Toman la decisión de cuidar de mejor manera a toda la comunidad.
Sin embargo, algunas veces los líderes son corruptos o abusivos. Pueden usar su autoridad para suplir sus propias necesidades en lugar de servir en favor de las necesidades de los demás. Quizás maltraten a los otros para ganar poder o riquezas para sí mismos o porque les gusta demostrar que están en control.
Permite que los estudiantes compartan sus pensamientos. Recuérdales de nuevo que no usen nombres de líderes específicos, sino que hablen de ellos en general.
El versículo que recién leímos nos dice que honremos a todos los líderes de cada institución humana, incluidos aquellos cuyas ideas no estamos de acuerdo y con los que su comportamiento no es honorable. Incluso cuando no estamos de acuerdo, tenemos que obedecer las leyes y siempre hacer lo correcto.
Permite que los estudiantes compartan sus ideas.
Aquí hay algunas ideas para ayudarte a honrar a las autoridades de tu vida.
Céntrate en lo positivo. Por ejemplo, si se necesita un pozo nuevo en tu comunidad, pero los líderes escogen reparar la calle, piensa en cómo una calle mejorada ayudará a tu comunidad.
Habla de manera respetuosa. Si no tienes nada positivo que decir sobre una figura de autoridad, mantén tus opiniones para ti mismo. Incluso cuando no estés de acuerdo con aquellos en autoridad, no digas cosas negativas sobre ellos. Las palabras negativas crean sentimientos negativos. Entonces, incluso cuando aquellos que están en autoridad se comporten de maneras deshonrosas, no compartas opiniones negativas o no actúes enojado contra ellos. Cuando te comuniques, hazlo de una manera respetuosa para que puedas compartir tus opiniones con los demás sin causar peleas.
Considera las consecuencias. Comportarse de forma irrespetuosa hacia aquellos en autoridad generalmente tiene un efecto negativo en tu vida. Por ejemplo, si le hablas irrespetuosamente a un oficial de policía, puede que te arreste. Si no haces lo que dice tu supervisor, quizás pierdas tu trabajo. Antes de que tomes una decisión que puede tener consecuencias negativas en tu vida, considera con mucho cuidado tu decisión.
Ofrece ayudar. Quizás no pienses que tienes mucho que ofrecer, pero puedes ayudar en tu comunidad. Por ejemplo, si sientes que hay mucha basura a la orilla del camino, arréglatelas para limpiar con un grupo de amigos. Si ves que el techo de un vecino necesita ser reparado, habla con tu comunidad o líderes de la iglesia sobre eso. A pesar de que no puedas arreglar todo lo que está malo en tu comunidad, es posible hacer una diferencia en la vida de las personas que te rodean.
¡Ora! Puedes orar por una actitud de humildad y respeto. Incluso cuando los líderes no se comporten honorablemente, trátalos con respeto. ¡También puedes orar por aquellos líderes que actúan de maneras honorables! Recuerda que Dios los puso en autoridad, y Él es más poderoso que cualquier otro ser humano en la tierra, incluyendo a los líderes. Pídele que te ayude a honrar a aquellos que están en autoridad sobre ti.
Honrar a la autoridad no significa que debemos adorar a nuestros líderes. Tampoco quiere decir que tenemos que hacer cosas que van en contra de la ley de Dios porque un líder nos dijo que lo hiciéramos. Escucha lo que dice la Biblia acerca de la autoridad de Dios.
Todos deben someterse a las autoridades públicas, pues no hay autoridad que Dios no haya dispuesto, así que las que existen fueron establecidas por él.
Romanos 13:1
Son establecidas por Dios.
Dios es la máxima autoridad, y sus propósitos para tu vida siempre son buenos. Incluso cuando los líderes de la tierra no hacen lo que es mejor para ti, Él se preocupa y trabaja para tu bien.
Recuerda a los estudiantes las ideas que les diste anteriormente: centrarse en lo positivo, hablar respetuosamente, considerar las consecuencias, ofrecer ayuda y orar por una actitud de humildad y respeto.
La Biblia nos dice que debemos orar con frecuencia por nuestros líderes.
Si utilizas el Cartel del Versículo para Memorizar, muéstralo a los estudiantes.
Así que, recomiendo, ante todo, que se hagan plegarias, oraciones, súplicas y acciones de gracias por todos, especialmente por los gobernantes y por todas las autoridades, para que tengamos paz y tranquilidad, y llevemos una vida piadosa y digna.
1 Timoteo 2:1–2
Piensa en 5 personas que tienen autoridad en tu vida. Puede ser uno de tus padres, un líder de la iglesia, un funcionario de gobierno, un oficial de policía o alguien más. Empuña la mano al frente tuyo. A medida que piensas en cada persona, levanta un dedo. Cuando todos los dedos estén alzados, ora por cada uno de ellos de manera específica. Mientras lo haces, baja un dedo. Si no quieres hablar con Dios sobre esas personas, puedes pensar en cómo centrarte en lo positivo, hablar con respeto y ofrecer ayuda a esa persona.
Opcional: Si estás usando las Páginas del Alumno, los estudiantes pueden usarlas para responder.
Dales 2 o 3 minutos para orar o pensar en silencio. Finaliza la clase diciendo esta bendición por los estudiantes, basada en Romanos 13:1,7 y Timoteo 2:1–2.
Bendición: Que Aquel que da toda autoridad, te dé una actitud de respeto y honra hacia los líderes de tu vida, ya sea que se comporten de manera honorable o no, para que puedas llevar una vida tranquila y pacífica.
Si tienes tiempo, comparte esta canción con los adolescentes.
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