Cada recurso digital utilizado en esta lección está disponible para descargar utilizando el botón a continuación. Durante la lección, la información para ti está escrita en letra regular y lo que sugerimos para hablar o leer en voz alta a los niños está en negritas.
En algunas lecciones encontrarás “ARTÍCULOS DE RECURSOS”. Son artículos escritos por expertos de todo el mundo que te equiparán para tu trabajo con niños y adolescentes. Compártelos con los padres o tutores si lo consideras apropiado.
Si tu clase se reúne en un espacio interior, reúne suficientes hojas, ramitas, ramas y cortezas para grupos de 4 o 5 niños con el fin de que hagan imágenes de árboles pequeños. Si tienes cartulina, o papel y pegamento, o cinta adhesiva disponible, también júntalos. Reserva los palos para el final de la lección. Separa los diferentes materiales en pequeños montones al frente de la clase.
Bendito el hombre que confía en el Señor y pone su confianza en él. Será como un árbol plantado junto al agua, que extiende sus raíces hacia la corriente; no teme que llegue el calor, y sus hojas están siempre verdes. En época de sequía no se angustia, y nunca deja de dar fruto.
Jeremías 17:7–8
¿Alguna vez has visto un árbol o planta marchitarse en un día caluroso? Lo más probable es que esta planta no tenía raíces profundas o estaba lejos de la fuente de agua. De cualquier forma, las plantas no pueden sobrevivir si no tienen agua y buenas raíces. ¡Nuestra fe puede ser como un árbol con raíces profundas plantadas cerca de un arroyo que no se secará o marchitará!
¿Sabes cuánto Dios se preocupa por ti? Te ama tanto que te dice que dependas de Él. Cuando pones tu fe en Dios y confías en su cuidado, ¡serás como el árbol de estos versículos! Coloca tu confianza en Dios y observa cómo te cuida cuando las cosas se ponen difíciles. ¡Siente cuán saludable hace que sea tu espíritu! ¡Alégrate al experimentar el agua de vida que solo Él puede dar!
Anima a las familias a que salgan a caminar y observen los árboles. Pídeles que hablen sobre cuán importante son las raíces para los árboles, a pesar de que generalmente no se pueden ver.
Consejo para el docente: Si es posible, envíe por correo electrónico o mensaje de texto la tarjeta de conexión familiar a las familias de sus estudiantes.
Da la bienvenida a los estudiantes a medida que ingresan a la sala de clases y pídeles que formen dos filas en los lados opuestos de la sala, una al frente de la otra.
Es tan bueno tenerlos a todos aquí hoy. Levanta la mano si te gusta trepar por los árboles. A muchos niños les gusta hacerlo. ¡Pueden trepar estos árboles grandes porque generalmente son fuertes!
Formaste 2 filas cuando llegaste a la clase. Ambas filas deben caminar una hacia la otra. Cuando las 2 filas se encuentren, forma una pareja con la persona que tienes al frente. Luego tú y tu compañero se unirán a la pareja que tienen a la derecha para crear un grupo. Trabajarás en estos grupos hoy para hacer el “ ¡árbol artístico!”.
En primer lugar, cada integrante del equipo reunirá 2 o 3 elementos de uno de los montones de materiales que están al frente de la clase. Por ejemplo, una persona juntará algunas hojas, otro recogerá un par de ramas. Tu equipo necesitará hojas, ramitas, ramas, cortezas y otros materiales para crear un árbol.
Una vez que recolectes los materiales, crea con ellos la imagen de un árbol en el suelo. El árbol no se levantará, será plano como una foto. Tendrás alrededor de siete minutos, entonces reúne los materiales rápidamente y con cuidado, luego empieza a crear tu árbol artístico. Recuerda que debes caminar cuando te muevas por la sala. ¡Hagamos el árbol artístico!
Materiales opcionales: Da a cada pareja o grupo de estudiantes un pedazo de cartulina o papel y un poco de pegamento o cinta adhesiva para crear el árbol.
Después de siete minutos, pide a los niños que dejen de trabajar en sus árboles y se ubiquen con sus manos detrás de sus espaldas. Diles que caminarán alrededor de la sala y mirarán los árboles artísticos de todos. Guía a los niños a recorrer la sala. Dales de 1 a 2 minutos para caminar, después deben tomar asiento con sus grupos del árbol artístico para la lección.
¡Todos son muy buenos creando un árbol artístico! ¡Veo algunos árboles maravillosos! A medida que caminaba por la sala, vi muchos árboles lindos. Pero, a la mayoría de sus árboles les faltaba algo importante que les ayuda a crecer. ¡Raíces! Las raíces son muy importantes aunque no se ven cuando miras un árbol. Probablemente esa es la razón por la que no le hiciste raíces a tu árbol artístico.
Deja que 2 o 3 niños respondan.
Hay muchas formas en que las raíces ayudan al árbol. Las raíces ayudan al árbol a tomar el agua del suelo que necesita para crecer. Como sucede contigo, a los árboles también les da sed. Un árbol tiene que tener agua, sino no puede crecer. Si no tiene agua con el tiempo morirá. Las raíces ayudan al árbol a que se pare alto y fuerte. Cuando trepas un árbol, las raíces son las que evitan que el árbol se caiga.
Pide a los niños que se pongan de pie y que se alejen de su árbol artístico para abrir un espacio donde todos los estudiantes puedan formar un círculo grande.
En la Biblia Dios compara a las personas con los árboles. Una comparación muestra de qué manera dos cosas se parecen. Presta atención a estos versículos de Jeremías que dicen que las personas que confían en Él son como los árboles. Después de que escuches estos versículos de la Biblia, dime por qué piensas que Dios dice que las personas que dependen de Él y confían en Él son como árboles.
Si es posible, por favor lee este versículo directamente de tu Biblia.
Bendito el hombre que confía en el Señor y pone su confianza en él. Será como un árbol plantado junto al agua, que extiende sus raíces hacia la corriente; no teme que llegue el calor, y sus hojas están siempre verdes. En época de sequía no se angustia, y nunca deja de dar fruto.
Jeremías 17:7–8
Permite que 2 o 3 niños respondan. Lee el versículo de nuevo si nadie responde.
Confiar en Dios es muy importante para nosotros, al igual que las raíces son muy importantes para un árbol. A pesar de que no puedes verlas, las raíces ayudan a que el árbol crezca fuerte. Confiar en Dios es algo que sucede dentro de ti y que no puedes ver. Cuando lo haces, esto te da raíces para ayudarte a crecer fuerte en la fe. Cuando te pregunto: “¿qué necesitas para crecer fuerte?”. Dices: “¡Raíces!”.
Los niños responden: ¡Raíces! Repite esto una vez más.
Escuchemos de nuevo para ver dónde está plantado el árbol.
Será como un árbol plantado junto al agua, que extiende sus raíces hacia la corriente.
Jeremías 17:8a
El árbol está plantado cerca del agua, al lado de la corriente.
Un árbol necesita agua. Envía sus raíces a conseguir agua. El agua ayuda al árbol a mantenerse sano. Si no hay agua, las hojas se ponen marrones. Si no hay agua, el árbol no será fuerte. ¡Confiar en Dios nos mantiene saludables! ¡Confiar en Dios es como enviar nuestras raíces a conseguir agua! Cuando te pregunte: ¿Qué necesitas para mantenerte saludable? Dirás: ¡Raíces!
Los niños responden: ¡Raíces! Repite esto una vez más.
Los niños responden: ¡Raíces!
Confiar en Dios significa que sabes que cuida de ti y te ama mucho. También quiere decir que crees que cualquier cosa que Dios hace es buena. Escucha lo que dice la Biblia.
Depositen en él toda ansiedad, porque él cuida de ustedes.
1 Pedro 5:7
Este versículo dice que deposites tus preocupaciones o ansiedades en Dios y que creas que cuida de ti. Cuando oras y entregas las preocupaciones a Él, estás confiando en Dios. Cuando sabes que Dios te ama y se preocupa por ti, confías en Dios y tus raíces son cada vez más profundas. Cuando sabes que Dios está contigo durante un momento peligroso y aterrador, confías en Dios y tus raíces se profundizan. Cuando entiendes que Dios está contigo en los buenos tiempos y también en los malos, confías en Dios y tus raíces son cada vez más profundas. Si quieres raíces profundas, ¿qué tienes que hacer? ¡Confiar en Dios! Cuando te pregunto si quieres raíces profundas, ¿qué tienes que hacer? Tú dices: ¡Confiar en Dios!
Responde con los niños: “Confiar en Dios”. Repite esto una vez más.
Los niños responden: ¡Raíces! Repite esto una vez más.
Los niños responden: ¡Raíces!
Cuando sabes que Dios se preocupa por ti y que te ama, te ayuda a que tus raíces crezcan profundamente. Ahora escuchemos el primer versículo bíblico de nuevo. La segunda parte nos dice muchas cosas buenas que vienen por confiar en Dios y al tener raíces profundas. Escucha con atención la segunda parte del versículo bíblico y dime qué buenas cosas les suceden a las personas que confían en Dios.
Bendito el hombre que confía en el Señor y pone su confianza en él. Será como un árbol plantado junto al agua, que extiende sus raíces hacia la corriente; no teme que llegue el calor, y sus hojas están siempre verdes. En época de sequía no se angustia, y nunca deja de dar fruto.
Jeremías 17:7–8
Hay 4 cosas buenas para las personas que confían en Dios y tienen raíces profundas.
Repite las 4 oraciones del versículo que leíste si los niños no responden. Las respuestas son: no tiene temor, sus hojas están siempre verdes, no se preocupa y da fruto.
Recuerda que Dios está comparando a las personas que confían en Dios con los árboles. A continuación, vemos lo que el versículo significa para las personas. Cuando confías en Dios:
Los niños responden: ¡Confiar en Dios! Repite esto una vez más.
Los niños responden: ¡Raíces! Repite esto una vez más.
Los niños responden: ¡Raíces!
Dios dice que cuando pones tu confianza en Él y dependes de Él, serás como un árbol plantado junto al agua. Tus raíces saldrán hacia la corriente. Crecerás fuerte y tu fe será saludable.
Pide a los niños que regresen al árbol artístico que hicieron con sus grupos.
Mira a tu árbol artístico de nuevo. Hagamos raíces largas y profundas en el árbol. Las raíces son muy largas y alcanzan una gran distancia. Daré a cada persona de tu grupo un palo para que puedas crear las raíces para el árbol.
A medida que agregas las raíces al árbol, dínos de qué manera Dios cuida de ti. Puedes usar el versículo de la Biblia de nuestra lección para sacar ideas. También puedes decir cómo has experimentado personalmente el cuidado de Dios por ti. Por ejemplo, sé que Dios me cuida porque está conmigo cuando la vida es difícil.
Da a los niños 3 minutos para poner las raíces en sus árboles.
Opcional: Si usas las Páginas del Alumno, pásales lápices de colores para que coloreen sus dibujos. Deja que tengan 2 o 3 minutos para completar su actividad.
Desearás que tus raíces crezcan más y más profundamente para estar fuerte y saludable. Esto significa que tienes que recordar que Dios te ama y cuida de ti. ¡Puedes confiar que se preocupa por ti! Nuestro versículo para memorizar hoy nos recuerda algunas de las razones por las cuales podemos confiar en Dios.
Si utilizas el Cartel del Versículo para Memorizar, muéstralo a los niños.
La palabra del Señor es justa; fieles son todas sus obras.
Salmos 33:4
Aplaude al ritmo de las palabras en la primera mitad del versículo. Haz una demostración de estas acciones en la segunda mitad del versículo:
Fieles son—Señala al cielo, luego indica “si” asintiendo con tu cabeza.
Todas sus obras—Mantén un brazo sobre tu cuerpo hacia un lado. Luego llévalo hacia el frente hasta extenderlo hacia el otro lado de tu cuerpo.
Repite las palabras, el ritmo y las acciones con los niños tres veces.
Finaliza la clase diciendo esta bendición por los niños, basada en Jeremías 17:7-8.
Bendición: Que confíes y dependas de Dios. Que seas como un árbol plantado junto al agua. Que tu fe crezca para estar saludable y fuerte.
Si tienes tiempo, comparte esta canción con los estudiantes.
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