Asombrado por la presencia de Dios

Nota para el maestro:

Cada recurso digital utilizado en esta lección está disponible para descargar utilizando el botón a continuación. Durante la lección, la información para ti está escrita en letra regular y lo que sugerimos para hablar o leer en voz alta a los niños está en negritas.

En algunas lecciones encontrarás “ARTÍCULOS DE RECURSOS”. Son artículos escritos por expertos de todo el mundo que te equiparán para tu trabajo con niños y adolescentes. Compártelos con los padres o tutores si lo consideras apropiado.

Focus on Spiritual Formation

Materiales
  • Biblia
  • Recipiente (de vidrio o plástico si es posible)
  • Jarro lleno de agua (lo suficiente para llenar el contenedor hasta el borde)
  • Pelota (puede ser de papel, tela o de otras fibras)
Materiales opcionales
  • Cartel del Versículo para Memorizar
  • Páginas del Alumno
  • Lápices de colores

Antes de la clase, coloca el jarro y el recipiente al frente de tu espacio de enseñanza. Asegúrate de que haya espacio suficiente para que los niños se sienten donde puedan ver los materiales.

Devocional del maestro

¿Soy acaso Dios solo de cerca? ¿No soy Dios también de lejos? —afirma el Señor—. ¿Podrá el hombre hallar un escondite donde yo no pueda encontrarlo? —afirma el Señor— ¿Acaso no soy yo el que llena los cielos y la tierra? —afirma el Señor—.
Jeremías 23:23–24

Dios nos ve a todos nosotros todo el tiempo sin excepción. Cuando pensamos en esto con nuestra comprensión” humana podemos sentirnos muy pequeños y vulnerables. Sin embargo, cuando ponemos esto en la perspectiva de que Dios está con nosotros en todo momento, protegiéndonos y guiándonos, puede ser muy tranquilizador.

¿Qué significa saber que Dios está contigo todo el tiempo? ¿Alguna vez sientes su presencia contigo? Cierra los ojos y busca la presencia de Dios ahí donde estás. A medida que los abres, ten presente que aunque no puedas ver o sentir la presencia de Dios contigo, Él está ahí. Incluso si sientes como si estuviera muy lejos, Él está parado justo al lado tuyo. Nunca te dejará. Confía en que Dios está presente contigo todos los días.

Conexión familiar

Anima a las familias a que jueguen a las escondidas con sus hijos. Haz que los niños se escondan y que los adultos o los hermanos mayores los busquen. Si es posible, que las familias hablen de que Dios los ve en todas partes.

Consejo para el docente: Si es posible, envíe por correo electrónico o mensaje de texto la tarjeta de conexión familiar a las familias de sus estudiantes.

La Lección

1. Conexión:

Hacer una actividad para mostrar cuánto de la tierra está llena de la presencia de Dios.

Saluda a los niños a medida que llegan a la clase. Pídeles que se sienten cerca del jarro y el recipiente. Párate junto al jarro de agua y el recipiente. Asegúrate de que todos los niños puedan ver los elementos.

La última vez que nos vimos hablamos sobre lo que Dios sabe. ¡Dios sabe todo lo que está pasando! No solo eso, ¡lo sabe todo antes de que suceda! Hoy, hablaremos sobre la presencia de Dios. Comencemos con una pregunta.

Consejo para el maestro: Aunque la siguiente pregunta puede parecer muy profunda y difícil de responder, es importante recordar que los niños a esa edad a menudo simplemente aceptan una respuesta como un hecho sin preocuparse mucho de los detalles. Si un niño pide más información, ofrécele buscar las respuestas y traerlas para la siguiente clase o simplemente explica que hay muchas cosas sobre Dios que no entendemos.

¿Dónde está Dios?

Permite que 2 niños respondan. Es probable que la mayoría señale o diga que está en el cielo.

Para ayudarnos a responder esta pregunta, utilizaremos este jarro y un poco de agua. ¿A quién le gustaría ayudarme con nuestra actividad?

Elige a 2 niños para que te ayuden. Levanta el recipiente y muestra a la clase su interior.

Vamos a imaginarnos que este recipiente representa el mundo. Si buscáramos a nuestra clase en el mundo, seríamos demasiado pequeños para vernos.

¿Qué tan grande piensas que sería Dios si lo comparáramos con este mundo?

Permite que 2 o 3 niños respondan.

¿En qué parte del mundo piensas que puede estar Dios?

Permite que 1 o 2 niños respondan.

Vamos a averiguar cuánto del mundo está lleno con la presencia de Dios.

Pide a 2 voluntarios que sostengan el recipiente mientras viertes el agua en él. Detente cuando el recipiente tenga un poco de agua. Si no estás usando un recipiente transparente, muéstrales a los niños cuánta agua hay dentro.

Si somos pequeñas manchitas y Dios es más grande y más poderoso que cualquier cosa en la tierra, tendría que estar en muchas más partes del mundo que nosotros, ¿cierto? ¿Y si te dijera que esto solo muestra una pequeña mancha de dónde Dios está todo el tiempo? ¿Quieres ver todos los lugares en los que Dios está en el mundo? Veamos cómo luciría.

Pide a los voluntarios que sostengan el recipiente mientras viertes el agua en él. Llena el recipiente hasta el borde. Si se derrama un poco de agua, está bien. Si no usas un recipiente transparente, permite que los niños se pongan de pie para que puedan ver dentro.

¡Dios está en todas partes todo el tiempo! ¡Nunca hay un lugar o un momento en el que Dios nos esté ahí! Su presencia siempre está con nosotros. ¡Esto es maravilloso! Vamos a aprender más de la presencia de Dios. 

2. Enseñanza:

Aprender que Dios está en todas partes y en todo momento (Jeremías 23:23–24; Nehemías 9:6; Salmos 139:5).

Escucha con mucha atención lo que dice la Biblia sobre dónde está Dios todo el tiempo.

Si es posible, lee estos versículos directamente de tu Biblia.

¿Soy acaso Dios solo de cerca? ¿No soy Dios también de lejos? —afirma el Señor—. ¿Podrá el hombre hallar un escondite donde yo no pueda encontrarlo? —afirma el Señor—¿Acaso no soy yo el que llena los cielos y la tierra? —afirma el Señor—.
Jeremías 23:23–24

¿Dónde está Dios?

Las respuestas pueden incluir: está en todas partes. Está cerca y lejos. Él llena la tierra.

¡Dios está en todas partes en la tierra y en el cielo todo el tiempo! Lo sabíamos por nuestra actividad al comienzo de la clase. Vamos a hablar de dónde está Él fuera de la tierra por un momento. Para ayudarnos a comprender esto, escuchemos con atención este versículo de la Biblia: 

¡Solo tú eres el Señor! Tú has hecho los cielos, y los cielos de los cielos con todas sus estrellas. Tú le das vida a todo lo creado: la tierra y el mar con todo lo que hay en ellos. ¡Por eso te adoran los ejércitos del cielo!
Nehemías 9:6

Cuando pensamos en todo lo que Dios creó, a menudo pensamos en lo que hay en la tierra. Este versículo nos recuerda que Dios creó todo. ¡Esto incluye todas las estrellas, los planetas y todo el espacio en el universo entero! El universo es lo que llamamos toda la creación de Dios, incluso lo que vemos en el cielo de noche.

Consejo para el maestro: Escuchar sobre todas las cosas que Dios creó y aprender que está en todas partes inspira un sentido de asombro en los niños.

Aunque nos parezcan pequeñas, ¡las estrellas del cielo son enormes! La estrella más pequeña del cielo es aún más grande que nuestro planeta. De hecho, podrían caber más de 1.000 planetas tierra en la estrella más pequeña. ¡Muchas estrellas son aún más grandes que eso! Son del tamaño de nuestro sol o más grandes.

¿Cuántos planetas tierra piensas que podrían caber dentro de nuestro sol?

Permite que 2 o 3 niños respondan.

¡Puede que no parezca así desde aquí porque el sol está muy lejos de nosotros, pero nuestro sol es enorme! ¡Es aproximadamente del tamaño de 1.3 millones de planetas tierra!

Consejo para el maestro: Muchos niños pequeños no tienen un entendimiento claro de números muy grandes. Si es necesario, puedes explicar que 1.000 es 10 veces 100. Luego explica que 100.000 es 100 veces 1.000. Por último, explica que 1 millón es 10 veces 10.000. ¡Ese es un número muy grande!

Esta noche, cuando mires todas las estrellas del cielo, piensa en el hecho de que solo podemos ver una pequeña cantidad de estrellas comparado a todas las estrellas del universo. ¡Dios creó todo el universo! ¡Dios es maravilloso! También está en todas partes en el universo todo el tiempo, y es así como puede estar con todos nosotros todo el tiempo. Escucha de nuevo estos versículos de la Biblia.

¿Soy acaso Dios solo de cerca? ¿No soy Dios también de lejos? —afirma el Señor—. ¿Podrá el hombre hallar un escondite donde yo no pueda encontrarlo? —afirma el Señor—¿Acaso no soy yo el que llena los cielos y la tierra? —afirma el Señor—.
Jeremías 23:23–24

Dios está en todas partes en todo momento. No hay ningún lugar al que podamos ir donde Él no esté. Esto es algo que solo Dios puede hacer.

Para ayudarnos a recordar que Dios está en todas partes, ¡juguemos un juego! Elegiré a un niño para que se esconda en algún lugar de nuestro espacio de enseñanza. Luego, el resto de nosotros lo buscará hasta que alguien lo encuentre. ¿A quién le gustaría esconderse?

Elige a un niño para que sea el que se esconde. Haz que el resto de los niños se junten en un área del espacio y cierren los ojos. Pide que el que se esconde que encuentre un lugar para ocultarse mientras cuentas hasta 10. Cuando llegues a 10, haz que todos los niños abran los ojos y busquen al que se escondió. Una vez que alguien lo encuentre, reúne a los niños en un círculo al medio de tu espacio.

Aunque nos llevó un poco de tiempo encontrar al que se escondió, ¡no existe un lugar donde nos podamos esconder de Dios! Dios está en todas partes y sabe todo. Si bien Dios está en todas partes, nos ama tanto a cada uno de nosotros que también está con nosotros todo el tiempo cuidándonos. La Biblia dice:

Tu protección me envuelve por completo; me cubres con la palma de tu mano.
Salmos 139:5

Dios está aquí ahora. Está en todos los lugares que vemos. A veces, quizás sentimos que no está con nosotros. Cuando estamos lastimados o todo nuestro alrededor nos da temor, puede ser difícil creer que Dios está con nosotros; y cuando suceden cosas malas, podemos preguntarnos si Dios se da cuenta. La Biblia nos recuerda que no debemos tener temor y debemos saber de que Dios siempre está aquí con nosotros.

3. Respuesta

Hacer una actividad sobre dónde está Dios.

Vamos a hacer algo divertido para ayudarnos a recordar que Dios está con cada uno de nosotros. Piensa en un lugar al que vas todos los días. Dios está ahí ahora porque está en todas partes todo el tiempo.

Permite que tengan 30 segundos para pensar en algún lugar donde Dios está. Toma la pelota y muéstrasela a la clase.

En un momento, pasaremos la pelota por el círculo haciéndola rodar de un niño a otro. Cuando tengas la pelota, mira el lugar al que vas todos los días para ver que Dios está contigo. Recuerda, Dios está contigo en todas partes todo el tiempo, ¡puedes nombrar cualquier lugar al que vas!

Entrégale la pelota a un niño y pídele que nombre un lugar donde está Dios. Permite que los niños hagan rodar la pelota de niño a niño, nombrando los lugares en los que está Dios. Cuando todos hayan tenido un turno, o después de 5 minutos, agradece a ese niño por sus ideas y recoge el balón.

Consejo para el maestro: Si no tienes tiempo para que todos los niños hablen, dales 30 segundos para dirigirse a otros niños y contar sus respuestas de dónde está Dios. Esto permitirá que los niños que no han compartido sus ideas contribuyan a la conversación y sepan que valoras sus pensamientos.

Opcional: Si usas las Páginas del Alumno, pásales lápices de colores y deja que tengan 2 o 3 minutos para dibujar los lugares donde está Dios.

¡Dios está en todas partes todo el tiempo! ¡No hay un lugar al que podamos ir donde Dios no nos vea! Vamos a tomar un momento para agradecer a Dios por estar con nosotros donde quiera que vayamos.

Haz una pausa de 15 a 20 segundos para dirigir a los niños en una oración agradeciendo a Dios por estar con ellos donde están y en cualquier lugar donde sea que van.

Hoy nuestro versículo de memoria nos recuera lo maravilloso que es Dios.

Versículo para Memorizar

Si utilizas el Cartel del Versículo para Memorizar, muéstralo a los estudiantes.

«Yo soy el Alfa y la Omega, el principio y el fin— dice el Señor Dios—. Yo soy el que es, que siempre era y que aún está por venir, el Todopoderoso».
Apocalipsis 1:8, NTV

Yo soy el Alfa y la Omega, el principio y el fin —Mira hacia el cielo. Extiende un brazo hacia ese lado mientras dices “Alfa”, y extiende el otro brazo hacia el otro lado mientras dices “Omega”.

  • Dice el Señor Dios — Señala al cielo.
  • Yo soy el que es — Levanta tus brazos al cielo y mira hacia arriba.
  • Que siempre era — Mira por encima del hombro detrás de ti.
  • Y que aún está por venir — Mira hacia adelante y estira los brazos delante de ti.
  • El Todopoderoso — Extiende los brazos hacia cada lado. Flexiona los brazos a la altura de los codos y simula mostrar tus músculos.

Finaliza la clase diciendo esta bendición por los niños, basada en Salmos 139:5.

Bendición: Que sepas que Dios está en todas partes todo el tiempo. Que recibas consuelo al saber que te mantiene a salvo en la palma de su mano.

Si tienes tiempo, comparte esta canción con los estudiantes:

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