En la lección, la información que debes conocer está escrita en letra normal, y lo que se recomienda decir o leer en voz alta a los niños está en negrita. Todos los recursos para cada lección, incluyendo la Guía para el Maestro, la Página del estudiante, la Tarjeta de conexión familiar y otros materiales, pueden descargarse en un archivo ZIP haciendo clic en el siguiente enlace:
En algunas lecciones encontrarás "Artículos de recurso". Estos son textos escritos por expertos de todo el mundo que ayudan a los maestros en su labor con niños y adolescentes. Pueden compartirlos con padres o tutores si lo consideran apropiado.
Eliseo fue al manantial y, arrojando allí la sal, exclamó: —Así dice el Señor: “¡Yo purifico esta agua para que nunca más cause muerte ni esterilidad!”
2 Reyes 2:21
Cuando el profeta Eliseo llegó a la ciudad de Jericó, el pueblo le informó que el agua era mala. La gente se enfermaba y la tierra había quedado estéril. Todo lo demás acerca de la ciudad era bueno, pero no parecía importar. Sin agua limpia, no había esperanza. Así que Eliseo hizo lo que Dios le mostró que hiciera, y por el poder de Dios, el agua fue purificada.
El agua limpia a menudo marca la diferencia entre la vida y la muerte. Es asombroso que Dios se preocupa por los detalles de nuestra vida, tanto que usó a Eliseo para purificar el agua, de modo que la gente pudiera llevar una vida saludable. A Dios también le importan los detalles de tu vida. ¿Cómo Dios ha provisto para tu buena salud? Esta semana, ¿qué podrías contar a otros de su gran cuidado?
Informa a los padres o tutores de tus alumnos que esta semana estarás enseñando acerca de la importancia del agua limpia para mantener la salud y especialmente evitar la diarrea. Si es posible, reúne a las familias para informarles acerca de esta enfermedad. Además, si puedes, haz copias del artículo de recurso que hay antes de esta lección y compártelo con las familias.
Consejo para el docente: Si es posible, envíe por correo electrónico o mensaje de texto la tarjeta de conexión familiar a las familias de sus estudiantes.
Saluda cordialmente a los niños cuando lleguen. Diles que harán un juego que tiene que ver con lavarse las manos.
Divide la clase en tres grupos y di a los niños de cada grupo que hagan las siguientes mímicas:
Haz que todos se dispersen alrededor del salón de clases. Los grupos no deben permanecer juntos sino esparcirse. Diles que los que son “agua” deben encontrar a alguien que es “jabón” y tomarse de las manos. La persona que es “agua” hará mímicas de natación con la mano libre. Juntos deben tocar a alguien que es un “germen”. Cuando toquen a esa persona, ésta sale del juego y debe sentarse. El “agua” y el “jabón” siguen tratando de tocar otro “germen”. Sigue con el juego durante diez minutos. Después del juego, pide que todos se sienten.
Este es un juego divertido, y nos recuerda lo que hemos aprendido, que el agua y el jabón pueden deshacerse de los malos gérmenes. Hoy hablaremos de una enfermedad común llamada diarrea. La diarrea puede ser muy grave. ¡Lo bueno es que la diarrea se puede prevenir!
¿Qué piensan que es lo mejor que se puede hacer para prevenir la diarrea? (Una pista: tiene que ver con lo que acabamos de jugar).
Permita que los niños lo descubran. Luego revele la respuesta: lavarse las manos con agua y jabón.
Dios te ama y te dio un cuerpo maravilloso. Él quiere que estés sano. Hoy, y en la próxima lección, hablaremos acerca de los riesgos para la salud, de cosas que pueden hacernos enfermar. Lo primero que aprenderemos es acerca de la diarrea, una enfermedad estomacal que se puede contraer por el agua sucia. Vamos a leer una historia bíblica sobre el agua sucia.
¿Sabían ustedes que la Biblia habla mucho acerca del agua? Esta historia es acerca de un profeta llamado Eliseo. Los profetas son personas que escuchan mensajes de Dios y comunican esos mensajes a los demás. Eliseo estaba en una ciudad llamada Jericó cuando pasó lo que les voy a contar. Escuchen lo que Dios hizo por el agua en esta ciudad.
Opcional: Si es posible, comparte la imagen de La Biblia en Acción. Lee 2 Reyes 2:19–22 directamente de tu Biblia.
Luego, los habitantes de la ciudad le dijeron a Eliseo: — Señor, como usted puede ver, nuestra ciudad está bien ubicada, pero el agua es mala, y por eso la tierra ha quedado estéril. —Tráiganme una vasija nueva, y échenle sal —les ordenó Eliseo. Cuando se la entregaron, Eliseo fue al manantial y, arrojando allí la sal, exclamó: —Así dice el Señor: “¡Yo purifico esta agua para que nunca más cause muerte ni esterilidad!” A partir de ese momento, y hasta el día de hoy, el agua quedó purificada, según la palabra de Eliseo.
2 Reyes 2:19–22
La tierra no producía cosechas. El agua no era buena para beber.
¿Qué le hizo Eliseo al agua?
Le echó sal. Sólo Dios usó sal para limpiar el agua, para que fuera buena para beber. Asegúrate de que los niños entiendan que esto fue un milagro, para que no piensen que la sal es útil para purificar el agua.
¿Qué dijo Dios a la gente a través de Eliseo?
Dios dijo que había purificado el agua. ¡Nunca más volvería a causar muerte!
¿Qué piensan ustedes que esta historia nos muestra acerca de Dios?
Permite que los niños den sus ideas. Pueden decir que Dios es poderoso y que hasta puede purificar el agua. Pueden decir que a Dios le importa que la gente esté sana. Dios quiere que la gente tenga agua limpia para beber.
Ahora vamos a hablar del riesgo de la diarrea, que puede ser causada por agua sucia.
Puedes salvar vidas aprendiendo a ayudar a alguien que tiene diarrea y practicando los pasos que ayudan a prevenir la diarrea. Así que esta información es realmente importante, si la recuerdas, tu familia y amigos pueden estar mejor y algún día, cuando te cases y tengas hijos, podrás mantener sano a tu bebé.
¿Qué es la diarrea?
Una persona tiene diarrea cuando frecuentemente tiene que ir al baño y el excremento es acuoso. Esta persona también puede vomitar, tener un vientre hinchado y sentir mucho dolor.
Los gérmenes que viven en el polvo, en la comida en mal estado, en el agua sucia y en excrementos humanos causan diarrea. Los gérmenes son tan pequeños que son invisibles. Se propagan a través de los alimentos y el agua que ha sido contaminada, a menudo por manos sucias y por moscas.
El cuerpo trata de deshacerse de los malos gérmenes a través de la diarrea. Una persona que tiene diarrea pierde agua y sales vitales del cuerpo. Esta pérdida de agua y sales se llama deshidratación. La deshidratación es peligrosa. Una persona puede morir de deshidratación por diarrea si no se reemplazan rápidamente el agua y las sales vitales.
Escucha cómo puedes ayudar a una persona que tiene diarrea. Actúa inmediatamente. No esperes las señales de deshidratación. Puedes prevenir la deshidratación haciendo lo siguiente:
Tan pronto como empiece la diarrea, da a la persona mucho para beber, para así reemplazar el agua que pierde. Dale té de hierbas, agua de coco, lima o limón, jugo de fruta diluida, sopas, o agua hervida de arroz. Alguien que tiene diarrea necesita una taza de líquido cada vez que vaya al baño con heces sueltas. No le des bebidas muy dulces, tales como bebidas efervescentes y té dulce porque este tipo de líquidos pueden empeorar la diarrea.
Da a la persona suficiente comida para que no pierda fuerzas. Los alimentos que contienen sal son especialmente importantes.
Así puedes saber si alguien está deshidratado: la persona tiene sed, su boca y su lengua están secas, su piel es pálida, y cuando la pellizcas, la piel vuelve lentamente a la normalidad. La persona se irrita, está inquieta, o medio dormida. Puede sentirse mareada o perder el conocimiento. Lleva a la persona a una clínica de salud si comienza con cualquiera de estas señales de peligro de deshidratación o si la diarrea continúa más de tres días.
Si puedes, compra Sales de Rehidratación Oral (SRO) en una farmacia, sigue las instrucciones en el paquete y da esto a la persona deshidratada para que lo beba. Si no puedes comprar las sales de rehidratación de la farmacia, puedes hacer una solución en casa para dar de beber a la persona. Disuelve 6 cucharaditas de azúcar y 1/2 cucharadita de sal en un litro de agua hervida, que puede ser enfriada. Ten mucho cuidado de mezclar las debidas cantidades de azúcar y sal. Demasiado azúcar puede empeorar la diarrea y demasiada sal puede ser muy perjudicial para la persona.
Ahora vamos a componer una canción que nos ayude a recordar cómo hacer la solución de rehidratación oral.
Ayuda a los niños a componer una canción con las siguientes instrucciones de cómo hacer una SRO. Incluye mímicas para ayudarles a recordar los ingredientes y los pasos. Dedica unos cinco minutos para componer la canción. Anímalos a compartir esta canción con su familia.
Hemos aprendido que la diarrea es peligrosa y que aun puede conducir a la muerte, si una persona se deshidrata. Lo bueno es que podemos prevenir la diarrea aprendiendo buenas prácticas de higiene
Primero quiero hablar del excremento y la higiene. El excremento no sólo es sucio, sino que también es muy peligroso. El excremento contiene gérmenes que pueden causar diarrea. Estos gérmenes pueden pasar del excremento a la comida y al agua bebible por las moscas y las manos sucias. Cuando comes cosas contaminadas o tomas agua contaminada, te da diarrea. Al usar el baño para hacer tus necesidades, y limpiarte y lavarte las manos después de cada vez, puedes ayudar a prevenir la propagación de los gérmenes de diarrea.
Hay que mantener los baños limpios y tapados. Las personas que no tienen baño o que van de paseo a un lugar sin baño, deben hacer sus necesidades lejos de la casa, de los lugares de juego, y de cualquier fuente de agua. Además hay que enterrar el excremento en un hoyo profundo para evitar que los gérmenes se propaguen y causen diarrea.
Hicimos un juego antes, en la lección sobre el lavado de manos. También hemos hablado de lavarnos las manos en las lecciones anteriores. Recuerden que debemos lavarnos las manos antes de comer, antes y después de preparar la comida, después de usar el baño, después de jugar afuera, y después de tocar animales. No olviden que las manos pueden parecer limpias, pero aun así pueden tener gérmenes.
Ahora vamos a aprender sobre el agua limpia y segura. Los gérmenes que causan diarrea pueden entrar en el agua en su lugar de origen, cuando la recolectas, al llevarla a la casa, al almacenarla, y aun cuando se usa el agua en la casa. A veces el agua parece clara y limpia, pero no es buena para beber porque tiene gérmenes.
Coloca en la mesa dos jarras de agua limpia, una taza sucia, una taza limpia, y una cuchara grande o un cucharón. Llena la primera taza con agua de la primera jarra.
¿Creen que este vaso de agua está limpio? ¿Cómo pueden saberlo?
El agua está limpia si su lugar de origen es limpio, si ha sido tratada con productos químicos, o si ha sido hervida.
¿Por qué el agua que viene de un arroyo, un pozo viejo, un lago o un estanque es sucia y dañina para tomar?
Puede haber gente lavando, alguien que hace sus necesidades cerca, o puede haber animales allí.
Haz caer la cuchara o el cucharón al suelo, písalo, y luego úsalo para pasar agua de la jarra a la taza sucia. Coloca tu dedo en la taza mientras la llenas de agua.
¿Está limpia esta taza de agua? ¿Por qué sí o por qué no?
Hay muchas razones y es importante que los niños las mencionen todas: la taza estaba sucia, el cucharón cayó al suelo y fue pisado; el cucharón sucio fue puesto en la jarra de agua limpia y tú tocaste el agua con tus manos, que pueden haber estado sucias.
Nunca debemos tocar con las manos el agua para tomar. Los gérmenes de diarrea podrían haber contaminado el agua por medio del cucharón, por las manos o por la taza sucia. Antes de usar los platos y los utensilios hay que lavarlos con agua y jabón.
Coloca la segunda jarra de agua en el suelo.
¿Es esta una forma segura de almacenar el agua? ¿Por qué sí o por qué no?
Está en el suelo y no está cubierta.
Para almacenar con seguridad una jarra de agua, no debe estar en el piso sino en una mesa, por ejemplo, y debe estar cubierta. El agua limpia es un maravilloso regalo de Dios. Algún día puede ser que no tengan agua limpia disponible. Hablemos de lo que se puede hacer para purificar el agua, de modo que sea segura para beber.
La mejor forma de purificar el agua es haciendo que hierva. Para eliminar todos los gérmenes el agua debe hervir por lo menos diez minutos. Esta es la mejor manera de purificar el agua. Es especialmente importante usar agua hervida para bebés, niños pequeños, y personas enfermas. Recuerden que hay que poner el agua en un recipiente limpio y tenerlo cubierto.
Digan algo que aprendieron hoy y que pueden compartir con otra persona.
Imagina que ves a un amigo que bebe agua sucia. ¿Qué le dirías?
Opcional: si usas las Páginas del Alumno, allí hay información importante sobre cómo tratar la deshidratación, y hay espacio para que los niños escriban o dibujen lo que pueden hacer para prevenir la diarrea.
Dios creó el mundo, ¡y te creó a ti! A Él le importa que haya agua limpia porque sabe que es importante para tu salud.
Di a los alumnos que formen una fila. Se van a turnar en verter un poco de agua limpia de una jarra limpia a una fuente grande y limpia. Cada vez que la fuente se llene, vierta el agua de nuevo en la jarra. Cuando viertan, pueden hacer una de las siguientes cosas:
Si utilizas el Cartel del Versículo para Memorizar, muéstralo a los estudiantes.
Alaba, alma mía, al Señor, y no olvides ninguno de sus beneficios. Él perdona todos tus pecados y sana todas tus dolencias;
Salmos 103:2-3
Cuando todos los niños hayan vertido el agua, di sobre ellos la siguiente bendición del Salmo 103:2-3.
Bendición: ¡Dios te ama y quiere que tengas salud! Nunca olvides su bondad por ti. Dios perdonará tus pecados y sanará tus enfermedades.
Si tienes tiempo, comparte esta canción con los estudiantes:
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