En la lección, la información que debes conocer está escrita en letra normal, y lo que se recomienda decir o leer en voz alta a los niños está en negrita. Todos los recursos para cada lección, incluyendo la Guía para el Maestro, la Página del estudiante, la Tarjeta de conexión familiar y otros materiales, pueden descargarse en un archivo ZIP haciendo clic en el siguiente enlace:
En algunas lecciones encontrarás "Artículos de recurso". Estos son textos escritos por expertos de todo el mundo que ayudan a los maestros en su labor con niños y adolescentes. Pueden compartirlos con padres o tutores si lo consideran apropiado.
*Si utilizas papel o cartón, ten disponibles los dibujos de la lección anterior para los niños que regresan a clase esta semana. Si usa la imagen opcional de La Biblia en Acción, guárdela para usarla nuevamente en la Lección 12.
Antes de que lleguen los niños, repasa la historia que comenzaste a dibujar para la lección 9. Usarás tu historia como ejemplo para esta lección. Añade a tu historia los siguientes elementos. Si no tienes un comienzo para tu historia, necesitarás doblar un papel o cartón en cuatro secciones. Cada número de abajo corresponde a un cuadrado en tu papel. Haz dibujos en el siguiente orden para mostrar tu historia.
Mis labios pronunciarán parábolas y evocarán misterios de antaño, cosas que hemos oído y conocido, y que nuestros padres nos han contado.
Salmos 78:2–3
Contamos historia para muchos fines diferentes. Las historias nos ayudan a conectarnos con otros y compartir nuestras experiencias, pero las historias más importantes se comparten muchas veces con muchas personas para que sean recordadas. La historia más importante de todas, la Biblia, se cuenta por medio de muchas historias pequeñas que nos ayudan a aprender lo que significa conocer y adorar a Dios y vivir de manera que lo agrade.
Tu historia es parte de la gran historia de Dios. Piensa en cosas que te han sucedido que has compartido con los demás. ¿Qué impacto está teniendo tu historia en la vida de aquellos que te rodean y en sus relaciones con Dios? A lo mejor no sabes la respuesta a esta pregunta, pero una cosa es segura, Dios quería que tú y yo usáramos historias para que los demás nos entiendan y comprendan quién es Él.
Anima a las familias a contar historias de su propia infancia a sus hijos. Esto podría significar relatar historias que escucharon siendo niños o narraciones sobre cosas que vivieron como niños.
Consejo para el docente: Si es posible, envíe por correo electrónico o mensaje de texto la tarjeta de conexión familiar a las familias de sus estudiantes.
Saluda a los niños cuando lleguen a la clase. Pide a cada uno que piense en su historia favorita y encuentre a un compañero con quien compartirla. Luego diles que se sienten en un círculo.
La última vez que nos vimos hablamos sobre los detalles que necesitamos para comenzar una historia. Levanta la mano si te acuerdas de una cosa que necesitas para comenzar a contar una historia.
Llama a 3 o 4 niños y haz que cada uno nombre un elemento que se necesita para contar una historia. Si no mencionan lo siguiente, recuérdales estos elementos: personajes, un lugar y un evento que los lleve a realizar un viaje.
En un momento, escucharás la historia del naufragio del apóstol Pablo. Te pediré que pongas atención a las cosas que recién mencionaste al comienzo de la historia. Luego, te contaré el resto de la historia. Esta es la historia verdadera de la Biblia del naufragio de Pablo.
Como escuchamos la última vez, Pablo fue llevado a juicio porque los líderes judíos decían que hacía cosas malas. Él le dijo al rey romano que no había hecho nada malo pero que quería llevar su caso al César, el emperador de todo el imperio romano.
Pablo fue enviado a Roma en un barco con otros prisioneros. Un comandante romano llamado Julio, guio a los otros soldados al barco.
¿Quiénes son las personas de la historia?
Las personas de la historia son Pablo, los otros prisioneros, Julio y los demás soldados.
¿Dónde están las personas?
Al principio, Pablo está en una corte y después en un barco.
¿Qué evento sucede para que comience el viaje de Pablo a Roma?
Pablo es arrestado y pide contar su historia al César.
¡Grandioso! Estas partes se unen para hacer el comienzo de nuestra historia verdadera de la Biblia. ¿Te gustaría escuchar el resto de la historia? Escucha con atención.
Opcional: Si es posible, comparte la imagen de La Biblia en Acción.
Mientras los hombres estaban navegando, ¡tuvieron un problema! Al poco tiempo de comenzar el viaje, Pablo advirtió que el viaje sería peligroso. El comandante romano no lo escuchó. Los hombres continuaron navegando y ¡quedaron atrapados en una tormenta! Esto es lo que sucedió después:
Si es posible, lee este versículo directamente de tu Biblia.
El barco quedó atrapado por la tempestad y no podía hacerle frente al viento, así que nos dejamos llevar a la deriva.
Hechos 27:15
La tripulación no podía controlar el barco. ¡El viento era muy fuerte!
¿Cuál es el problema de la historia?
Hubo una tormenta que puso la vida de los hombres en peligro. No podían controlar el barco.
¿Quieres escuchar cómo los hombres trataron de lidiar con su problema? Mientras te cuento la manera en que los hombres trataron de resolver el problema, dirás: “Esperamos que esto detenga el barco”.
Di: “Los hombres trataron”. Haz que los estudiantes respondan: “Esperamos que esto detenga el barco”, después de cada cosa que trataron de hacer para ayudar. Luego responde: “¡Pero esto no detuvo al barco”.
La tormenta continuó por muchos días. Pablo y las demás personas en el barco corrían gran peligro. Fue entonces cuando Pablo les contó a todos sobre el mensaje que recibió de Dios. Escucha lo que dijo Pablo a los hombres del barco.
Anoche se me apareció un ángel del Dios a quien pertenezco y a quien sirvo, y me dijo: “No tengas miedo, Pablo. Tienes que comparecer ante el emperador; y Dios te ha concedido la vida de todos los que navegan contigo”. Así que ¡ánimo, señores! Confío en Dios que sucederá tal y como se me dijo.
Hechos 27:23–25
Dios siempre cumple sus promesas. El barco se estrelló al lado de la isla de Malta, pero tal como Dios le había prometido a Pablo, todos los hombres del barco llegaron a tierra a salvo.
¿Cuál fue la solución al problema de esta historia?
El barco se estrelló y los hombres se escaparon en la isla.
No todas las historias tienen una solución. A veces el personaje de la historia aprende una lección de una situación difícil, pero el problema no se acaba. Otras veces, puede suceder que las personas de una historia no lleguen dónde querían ir pero el viaje los cambia de alguna manera. En la historia de Pablo, él al final va a Roma. Sin embargo, la pausa en su viaje le lleva a una lección valiosa. Las personas del barco aprenden que Dios está lleno de gracia y que cumple sus promesas.
Vamos a hablar más sobre la historia del naufragio de Pablo.
¿Qué sucedió para que la historia fuera emocionante?
Permite que 2 o 3 niños respondan.
¡Hubo una tormenta! Esto fue un problema en la historia porque los hombres perdieron el control del barco. Cuando tenemos problemas en nuestra vida, a menudo tratamos de resolverlos con nuestras propias fuerzas.
¿Qué hicieron los hombres para tratar de resolver su problema?
Arrojaron algunas cosas del barco e intentaron detenerlo.
En historias, a menudo escuchamos de personas tratando de resolver sus problemas. A veces esas son maneras buenas de resolver los problemas, pero en ocasiones, como en la historia de Pablo no podemos resolver nuestros propios problemas.
¿Quién solucionó el problema en la historia de Pablo?
Dios lo hizo.
Dios estuvo con Pablo a lo largo de la historia. La mayoría de las historias finalizan con una lección o con un cambio en las personas de la historia. En la historia de Pablo los hombres llegaron a tierra a salvo. ¡Sobrevivieron a una gran tormenta!
Da a los niños las hojas que dibujaron la última vez que vinieron a clases. A los que no asistieron a esa clase, dales una hoja en blanco o un pedazo de cartón doblado en 4 secciones. Si utilizas un área de tierra para que los niños dibujen, haz que dibujen 4 cuadrados.
Opcional: Si usas las Páginas del Alumno, puedes hacer que los niños las utilicen en vez del papel en blanco. Asegúrate de recolectarlas para la siguiente lección.
Piensa en los personajes, el lugar y la lección o el objetivo que creaste la última vez que nos encontramos. Si no los hiciste, puedes tomar un momento para hacer un dibujo de las personas en tu historia y del lugar donde comenzará.
Que los niños que no dibujaron personajes y lugares pasen tiempo dibujando estos elementos. Haz que los niños que ya tienen los comienzos de sus historias se sienten en parejas, y deja que tengan 2 o 3 minutos para que compartan y trabajen.
Ahora que todos tienen un comienzo para sus historias, pasemos un poco de tiempo creando la acción para las historias. Piensa en un problema o problemas que enfrentan tus personajes a medida que van en su viaje.
Muéstrales a los niños la historia que dibujaste antes de la clase. Explícales qué problema elegiste para los personajes de tu historia. Luego diles que piensen en problemas en sus propias vidas o dificultades que piensan que sus personajes podrían enfrentar. Dales 30 segundos para pensar en problemas que pueden usar para contar sus propias historias.
En la segunda sección de tu hoja, dibuja a tus personajes pasando por un problema. Si tus personajes tienen más de un problema que resolver, solo dibuja el problema más grande que tengan.
Dales 2 o 3 minutos para dibujar.
Ahora que tienes un problema para tu historia, vamos a pensar en cómo nuestros personajes intentarán resolver sus problemas.
Muestra a los niños cómo los personajes en tu historia intentarán resolver sus problemas. Luego dales 30 segundos para pensar en la manera que sus personajes solucionarán sus dificultades.
En la tercera sección de tu hoja, dibuja a tus personajes tratando resolver su problema. Mientras lo haces, piensa en lo que harán y dónde tienen que estar para solucionar el problema.
Dales 2 o 3 minutos para dibujar.
Finalmente, tu historia necesitará un final. Hay muchas maneras para finalizar una historia. Aquí hay algunos ejemplos para finales de historias:
Piensa en cómo te gustaría que finalizara tu historia. Luego, en el último recuadro, dibuja el final de tu historia.
Dales de 2 a 3 minutos para finalizar sus historias. Después de que todos los niños hayan terminado, escribe o haz que los estudiantes escriban sus nombres en sus hojas. Recolecta las hojas y guárdalas para la siguiente lección.
La gran historia jamás contada se encuentra en la Biblia. La Biblia es una gran historia contada en muchas historias más pequeñas. Nuestro versículo de memoria de hoy nos dice que las historias nos pueden ayudar a recordar cosas que han sucedido en el pasado.
Si utilizas el Cartel del Versículo para Memorizar, muéstralo a los estudiantes.
Los cielos cuentan la gloria de Dios, el firmamento proclama la obra de sus manos.
Salmos 19:1
Di este versículo con entusiasmo. Haz que los niños lo repitan contigo 3 veces. Finaliza la clase diciendo esta bendición por los niños, basada en Salmos 78:2–3.
Bendición: Que aprendas a contar historias para muchos propósitos. Que confíes en que Dios en su sabiduría te ayude a saber cómo y cuándo compartir tus historias.
Si tienes tiempo, comparte esta canción con los estudiantes:
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