En la lección, la información que debes conocer está escrita en letra normal, y lo que se recomienda decir o leer en voz alta a los niños está en negrita. Todos los recursos para cada lección, incluyendo la Guía para el Maestro, la Página del estudiante, la Tarjeta de conexión familiar y otros materiales, pueden descargarse en un archivo ZIP haciendo clic en el siguiente enlace:
En algunas lecciones encontrarás "Artículos de recurso". Estos son textos escritos por expertos de todo el mundo que ayudan a los maestros en su labor con niños y adolescentes. Pueden compartirlos con padres o tutores si lo consideran apropiado.
Entonces Pedro se acordó de lo que Jesús había dicho: «Antes de que cante el gallo, me negarás tres veces». Y saliendo de allí, lloró amargamente».
Mateo 26:75
Pedro lloró cuando se dio cuenta de lo que le había hecho a su amigo y Señor. Recién había visto a Jesús ser arrestado por una multitud de soldados. Había observado a otros seguidores huir. Quería estar cerca para ver lo que sucedía, aunque probablemente tenía miedo. Cuando fue acusado de haber estado con Jesús, negó a su amigo no sólo una vez sino tres veces. Si bien puede ser fácil juzgar a Pedro por no ser honesto en esta situación difícil, imagínate estar en su lugar por un momento. Cuando enfrentamos peligro, vergüenza u otras cosas difíciles muchos de nosotros podemos ser tentados a ser deshonestos.
Considera tu propia vida. ¿Alguna vez le has mentido a un amigo o has dicho una mentira sobre él? ¿Intentabas ayudar a alguien? ¿Tratabas de protegerte a ti mismo o a alguien más? ¿Estabas preocupado por lo que los demás pensarían si eras honesto? Está mal mentir. Afortunadamente, Dios sabe que no somos perfectos y entiende que cometemos errores. Escucha tu lamento cuando te das cuenta las cosas erradas que has hecho. Toma un momento para hablar con Dios y pedirle que te dé en un corazón honesto incluso cuando es difícil. ¡Él te escucha!
Anima a las familias a conversar sobre por qué a veces es difícil decir la verdad. Haz que compartan sobre las razones que la gente tiene para mentir en vez de decir la verdad.
Consejo para el docente: Si es posible, envíe por correo electrónico o mensaje de texto la tarjeta de conexión familiar a las familias de sus estudiantes.
Saluda a los niños a medida que llegan a la clase. Diles que piensen en lo que aprendieron durante la última clase y compartan algo que vivieron con otro niño. Luego que los estudiantes tomen asiento haciendo un círculo.
Deja que respondan 1 o 2 niños.
¡Hemos estado aprendiendo sobre la verdad y la honestidad! Cuando decimos la verdad, la gente confía en nosotros. Esto nos ayuda a construir relaciones. Hablemos sobre lo que sucede cuando mentimos en vez de decir la verdad.
A medida que te digo algo sobre lo que hace la mentira, la persona que sostiene la bola de hilo tomará la punta del hilo y la hará rodar por el círculo hacia otro niño. El siguiente niño tomará la bola y la hará rodar por el círculo hacia otro estudiante. Trata de pasar el hilo a alguien del lado opuesto del círculo. ¡Estamos creando una red enredada!
Entrega la bola de hilo a un niño y ayúdale a pasarla por el círculo sin soltar la punta. Luego asegúrate de que el siguiente niño pase la bola de hilo antes de leer la información sobre la mentira que viene continuación. Mientras hablas con los niños acerca de las mentiras, haz que pasen la bola de hilo de un lado hacia el otro por el círculo. Si es necesario, recuérdales que sujeten el hilo mientras lo pasan para que puedan crear una red.
Cuando mentimos una vez tras otra, esto puede crear una red. Decimos una mentira y luego tenemos que recordar lo que dijimos. Luego decimos otra mentira y debemos recordar ambas mentiras. Después de un tiempo podemos enredarnos tanto en nuestras mentiras que quedamos atrapados. Puede ser muy difícil salir de este enredo y esto quizás provoque que la gente no confíe en nosotros.
Si los niños aún están pasando la bola de hilo, dales tiempo para terminar de hacer una red.
El hilo enredado al frente tuyo se ha convertido en una red. La única forma de desenredarlo es diciendo la verdad.
Quiero que cada uno de ustedes piense en algo verdadero para decir. En un momento, desenredaremos nuestra red sacando el hilo del círculo. A medida que lo hacemos, iremos por el círculo y tomaremos turnos para decir algo verdadero. Por ejemplo, puedo decir: el cielo es azul. Esto es verdad.
Escoge a un niño para comenzar a decir algo que es verdad. Luego pide al niño que tenía el hilo al final del juego que se levante y le entregue la punta del hilo a la persona que se lo pasó. Haz que los niños continúen pasando el hilo de un lado hacia el otro mientras que los demás dicen declaraciones verdaderas hasta que la red se desenrede por completo. Si los niños no son capaces de desenredar la red completamente, explica que a veces, nuestras mentiras hacen que sea muy difícil arreglar nuestras relaciones con los demás.
Opcional: Si utilizas las Páginas del Alumno, da a cada niño un lápiz de color y deja que tengan 2 o 3 minutos para completar sus laberintos.
Esta actividad nos mostró lo que las mentiras pueden hacer y cuán difícil es arreglar las relaciones con los demás cuando están enredadas y torcidas. Esta es una razón por la que es mejor decir la verdad.
No siempre es fácil decir la verdad. Cuando suceden cosas que nos asustan o sabemos que podríamos causar problemas, puede ser que queramos mentir debido a nuestro temor. Esto fue cierto para uno los discípulos de Jesús llamado Pedro. Escucha esta historia verdadera de la Biblia.
Jesús estaba con sus discípulos en un jardín. Un grupo de soldados arrestó a Jesús porque sus líderes no creían que era el Hijo de Dios. Todos los discípulos de Jesús huyeron. Pero Pedro y otro discípulo los siguieron para ver lo que sucedería.
Si es posible, comparte las imágens de la Biblia en Acción.
Deja que 2 o 3 niños respondan.
Puede ser aterrador ver que arrestan a tu amigo. Definitivamente sería escalofriante saber que algo muy malo iba a acontecerle a tu amigo. Vamos a escuchar lo que le sucedió a Pedro. Mientras entraba al patio, una criada se acercó a Pedro.
Si es posible, lee el versículo directamente desde tu Biblia.
—¿No eres tú también uno de los discípulos de ese hombre? — le preguntó la portera.
—No lo soy —respondió Pedro.
Juan 18:17
¡Pedro mintió y dijo que no era un discípulo de Jesús!
Deja que 2 o 3 niños contesten.
Lo que sucedió a continuación te puede sorprender. Pedro esperó en el patio mientras el otro discípulo iba a hablar con el sumo sacerdote. Mientras esperaba, la gente le preguntó a Pedro dos veces más si conocía a Jesús. ¡En ambas oportunidades Pedro dijo que no lo conocía!
La Biblia no nos dice por qué negó conocer a Jesús. Sin embargo, la Biblia nos dice que Jesús sabía desde antes que Pedro haría esto. La Biblia dice:
Entonces Pedro se acordó de lo que Jesús había dicho: «Antes de que cante el gallo, me negarás tres veces». Y saliendo de allí, lloró amargamente.
Mateo 26:75
Lloró.
Las respuestas pueden incluir: se sintió mal porqué mintió sobre conocer Jesús, sabía que había hecho algo malo.
Pedro dijo una mentira sobre su amigo. No dijo una mentira sobre cualquier amigo. ¡Su amigo era Jesús!
Deja que 2 o 3 niños respondan.
No sabemos la respuesta a esta pregunta, pero está claro que Pedro tenía miedo de la respuesta. Acababa de ver que algo terrible le había sucedido a Jesús.
Incluso cuando estamos atemorizados e inseguros de lo que sucederá, es importante ser honestos. En esta historia verdadera de la Biblia, Pedro lloró después de mentir sobre conocer a Jesús. Mentir está mal y no ser honesto es incorrecto. Lo que hizo Pedro estuvo mal.
Dios conoce a cada uno de nosotros. Sabe lo que queremos y cómo nos sentimos. Cuando el temor y la preocupación nos impiden hacer lo correcto, Dios está con nosotros en nuestras luchas.
Coloca una mano en tu pecho. No la muevas. Si has hecho algo malo debido al temor y a la preocupación, levanta un dedo. Si no lo has hecho levanta dos dedos.
Puedes bajar tus manos. En la historia verdadera de la Biblia, Dios sabía que Pedro negaría a Jesús y también conocía que Pedro se sentiría mal por lo que había hecho. Esta es la razón por la que Jesús más tarde perdonó a Pedro y le pidió que guiara a su pueblo. Pedro fue perdonado, pero eso no significa que negar a Jesús fue lo correcto.
Vamos a trabajar juntos para descubrir lo que podemos hacer para decir la verdad en diferentes situaciones. Te explicaré en una situación hipotética. Luego, explicaré dos opciones de lo que puedes hacer a continuación. Mientras escuchas las opciones, coloca la mano cerca de tu pecho. Si escoges la opción uno, levanta un dedo. Si eliges la opción dos, levanta dos dedos.
Situación 1: Tu familia no tiene alimentos para comer hoy. La iglesia está dando pan y sopa. Eres el único miembro de tu familia que va a la iglesia. Te pones en la fila para la sopa, sin embargo también quieres sopa para tu familia. Escucha estas opciones y decide lo que harías a continuación.
Lee ambas opciones una vez, sin pedir a los niños que respondan. Recuérdales mantener las manos cerca de sus pechos. Luego, vuelve a leer las opciones y pide a los niños que muestren el número de dedos para indicar qué opción escogerían.
Opción 1: Ponerte en la fila y decirle a la persona que sirve que necesitas comida para tu familia.
Opción 2: Ponerte en la fila y decirle a la persona que sirve que té de más porciones de comida para ti cuando en realidad quieres llevársela a tu familia.
Intentar alimentar a tu familia es muy bueno pero ser honesto es importante también.
La opción número uno sería ser honesto.
Al decirle a la persona que sirve que necesitabas comida para toda tu familia, mostrarías honestidad mientras tratas de ayudar a tu familia. Si te dijeran que tu familia tendría que estar en la fila para la sopa, podrías ir a buscarlos para que se ubicaran en la fila de la sopa. Esto no tomaría más tiempo que la segunda opción y sería una manera honesta de alimentar a tu familia.
Situación 2: Tú y tu amigo decidieron no ir a la escuela hoy. Pasaste el día jugando afuera. Cuando llegas a tu casa, tu madre está allí. Te pregunta dónde estuviste todo el día y por qué no fuiste desde la escuela a la casa con tu hermano pequeño.
Opción 1: Le dices a tu madre que fuiste a un lugar con tu amigo después la escuela.
Opción 2: Le dices a tu madre que no fuiste a la escuela y olvidaste ir a buscar a tu hermano.
La opción 2 sería la honesta.
Estuviste con tu amigo todo el día, no solo después de la escuela. También estabas con tu amigo cuando se suponía que estarías en la escuela.
Si le dices a tu madre la verdad de que pasaste el día con tu amigo probablemente se enojará o se molestará pero generarás confianza en ella. Si mientes, puede que no te metas en problemas pero te arriesgas a que tu madre descubra la mentira y se enoje contigo por mentir y por faltar a la escuela.
Si utilizas el Cartel del Versículo para Memorizar, muéstralo a los niños.
Recuerda, Dios quiere que seamos honestos, incluso cuando sea difícil. Nuestro versículo para memorizar hoy nos dice:
Yo sé, mi Dios, que tú pruebas los corazones y amas la rectitud.
1 Crónicas 29:17a
Canta las palabras del versículo bíblico con los niños. Utiliza la misma canción que creaste en la lección 5. Haz que los niños repitan la canción contigo 3 veces. Recuerda la canción para que la cantes de nuevo en cada lección sobre la verdad y la honestidad.
Finaliza la clase diciendo esta bendición por los niños, basada en 1 Reyes 8:39.
Bendición: Que sepas que Dios entiende lo que hay en tu corazón. Que vivas con un corazón honesto. Que seas consolado al saber que Dios te escucha y te puede perdonar.
Si tienes tiempo, comparte esta canción con los estudiantes.
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