En la lección, la información que debes conocer está escrita en letra normal, y lo que se recomienda decir o leer en voz alta a los niños está en negrita. Todos los recursos para cada lección, incluyendo la Guía para el Maestro, la Página del estudiante, la Tarjeta de conexión familiar y otros materiales, pueden descargarse en un archivo ZIP haciendo clic en el siguiente enlace:
En algunas lecciones encontrarás "Artículos de recurso". Estos son textos escritos por expertos de todo el mundo que ayudan a los maestros en su labor con niños y adolescentes. Pueden compartirlos con padres o tutores si lo consideran apropiado.
Si un enemigo me insultara, yo lo podría soportar; si un adversario me humillara, de él me podría yo esconder. Pero lo has hecho tú, un hombre como yo, mi compañero, mi mejor amigo, a quien me unía una bella amistad, con quien convivía en la casa de Dios.
Salmos 55:12-14
¿Te entristecen estos versículos? Algo sucedió que separó a estos amigos. Puedes escuchar la confusión y el dolor en estas palabras. Este amigo, al que el salmista se refiere cariñosamente, es alguien con quien adoraba a Dios y caminaba regularmente. Cuando un extraño te dice o hace algo en tu contra, generalmente no te hiere profundo. Sin embargo, cuando alguien que te importa te lastima, el dolor puede ser casi insoportable.
¿Tienes algún amigo que te haya lastimado profundamente? ¿produjo una separación entre ustedes? ¿quieres reparar tu amistad rota? Es tiempo de que trates de arreglar esta relación. Si dejas que Dios intervenga, Dios te ayudará. Ignorar el problema no restaurará la amistad. Intenta hablar calmadamente con tu amigo sobre el problema que tuvieron y qué causó la separación. Comprométete a escuchar, incluso, si quieres reaccionar y culpar a los demás por lo que ocurrió. Debes estar dispuesto a perdonar para recuperar la amistad que una vez existió. Dios valora la amistad. Confía en que Él te ayudará a reparar tus relaciones rotas.
Anima a las familias a hablar con sus hijos sobre cómo sanar las amistades rotas. Puedes pedirles que nombren uno o más pasos que aprendieron hoy durante la clase.
Consejo para el docente: Si es posible, envíe por correo electrónico o mensaje de texto la tarjeta de conexión familiar a las familias de sus estudiantes.
Saluda a los niños a medida que ingresan a la clase. Pide a cada niño que nombre una manera en la que practicó cómo ser un buen amigo, durante la semana pasada.
Durante las últimas semanas, hemos estado aprendiendo sobre la amistad. Hoy aprenderemos acerca de cómo sanar las amistades rotas.
A veces los amigos no se ponen de acuerdo sobre cosas pequeñas, como por ejemplo tienen diferentes ideas acerca de a qué jugar. Esto puede crear roces entre los amigos. Cuando 2 cosas se frotan entre sí, esto crea fricción. Cuando dos amigos tienen ideas distintas o un amigo es poco amable con el otro, esto puede causar un conflicto.
Veamos cómo se siente la fricción. Cuidadosamente presiona tus manos con las palmas tocándose. Ahora frótalas rápidamente. Continúa frotándolas.
Diles que se detengan después de un minuto.
Se sienten calientes.
Frotarse las manos creó fricción y provocó calor. Las amistades pueden tener roces también. Por ejemplo, quizás hay cosas que te molestan de tu amigo. Quizás tengan pequeñas peleas. Con el tiempo, si hay mucha fricción puede causar problemas más grandes.
El relámpago es un ejemplo de algo más grande creado por la fricción. Dentro de las nubes de lluvia, pedazos de hielo rebotan hacia arriba y abajo. Mientras las nubes crecen, se rozan entre sí y se crea la energía. Cuando las nubes acumulan suficiente fricción, la energía creada puede explotar como un relámpago.
Cuando se acumula mucha fricción en una amistad, puede que de repente explotes de rabia con tu amigo. ¡Casi seguro que esto provocará una pelea! Levanta la mano si alguna vez has discutido con un amigo. La mayoría de la gente lo ha hecho.
Permite que 3 a 4 niños responda.
Los niños pueden responder: puedo hablar con mi amigo sobre lo que me molesta, detenerme y calmarme, alejarme y volver cuando esté más tranquilo, orar y pedirle ayuda a Dios que nos ayude.
Está bien si no estás de acuerdo con las ideas de tu amigo todo el tiempo. Todos son diferentes y tienen ideas distintas sobre las cosas. Sin embargo, gritar y pegar no está bien. Estas acciones lastiman tu amistad. Cuando la discusión explota y se convierte en pelea, puede destruir tu amistad. Dios se preocupa por los amigos. Dios quiere que tengamos amigos en nuestras vidas.
Haz que los niños se sienten en un círculo, para esta parte de la lección.
Piensa un poco en las cosas que se pueden romper. Esto incluye cosas que son delicadas y fáciles de quebrar o las que son duras y difíciles de romper. Por ejemplo, un vaso se puede romper si se cae en una superficie dura.
Permite que 2–3 niños respondan a las siguientes preguntas.
Algunas cosas se rompen fácilmente y otras son difíciles de quebrar. Ahora piensa en las amistades.
Sí se puede. Algo puede salir mal y lastimar la relación con tu amigo.
Deja que 2–3 niños respondan.
Aquí hay algunos ejemplos de cosas que pueden romper una amistad: no preocuparse por lo que un amigo necesita o quiere, no entender lo que quiere o trata de decir y decir malas palabras para lastimar los sentimientos de un amigo.
Cuando algo valioso se rompe, quieres arreglarlo. Lo mismo pasa con las amistades. Es difícil tener amistades rotas. Nos hace sentir tristes o enojados. Presta atención a lo que dice la Biblia de las relaciones rotas:
Si es posible, lee estos versículos directamente desde tu Biblia.
Más resiste el hermano ofendido que una ciudad amurallada; los litigios son como cerrojos de ciudadela.
Proverbios 18:19
La Biblia dice que una amistad rota es como una ciudad con murallas altas a la que no puedes entrar. Una vez que se rompe, puede ser difícil hacerse amigos de nuevo. Cuando la relación está rota o dañada, es importante dar pasos para arreglarla.
Está bien si tú y tu amigo toman decisiones diferentes, y tienen ideas distintas sobre las cosas. La mayoría del tiempo, esto no provoca peleas. Se vuelven peleas cuando no paras y no te das cuenta de que hay un problema y no se perdonan. Aquí hay algunas cosas que puedes hacer para arreglar las amistades rotas. Les daré algunos consejos para ayudarles a reparar sus amistades. Harán las acciones conmigo para recordar lo que digo.
¡Detente y cálmate!
Acción: Inhala por la nariz de manera profunda y lenta. Después, exhala por la boca lentamente.
Cuando hay un problema, detente y ocúpate del problema rápido. El problema no se irá a menos que hables. También, cuando estás enojado o lastimado, es fácil dejar que tus emociones tomen el control. No puedes pensar y tomar decisiones sabias si no tienes el control de tus emociones. Cuando permaneces calmado, tienes la capacidad de pensar mejor y tomar decisiones sabias. Esto te ayudará a reparar una amistad rota.
Declara: “detente y cálmate”, y repite el movimiento con los niños.
¡Ora!
Acción: Junta las manos al frente de tu cuerpo, como cuando oramos.
Pide a Dios que te ayude a hacer las paces, y que te ayude a sanar la amistad rota para que sea saludable y fuerte de nuevo. Invita a Dios a ser parte de tus amistades. Esto te ayudará a sanar una amistad rota.
Declara: “ora”, y repite el movimiento con los niños.
¡Escucha!
Acción: Mantén la mano en tu oído.
Dile a tu amigo que te ayude a entender el problema. No adivines lo que siente. Escucha a tu amigo de verdad. Cuando te cuente el problema, piensen juntos en lo que pueden hacer para que él no se siga sintiendo de esa forma. Esto te ayudará a reparar una amistad rota.
Declara: “escucha”, y repite la acción con los niños.
¡Perdona!
Acción: Sostén la mano derecha con la palma hacia arriba. Pon la punta de los dedos de la mano izquierda en la palma derecha. Haz movimientos circulares con los dedos en la palma derecha 2 veces.
La Biblia nos enseña que es importante que perdonemos. Lo mejor que puedes hacer para sanar amistades rotas es perdonar. Cuando lo haces, dices que tu amistad es más importante que tener la razón. El perdón no es fácil, pero Dios te ayudará a sanar tu amistad rota cuando perdonas a los demás. El perdón te ayudará a sanar una amistad rota.
Declara: “perdona”, y repite la acción con los niños.
Hagamos un juego para ayudarnos a recordar los consejos que aprendimos recién. Recuerda, cuando los amigos discuten y su relación se rompe, es igual a una ciudad con murallas altas y un portón con llave. Vamos a unir los brazos para formar “la muralla de una ciudad”. Para ganar este juego, trabajarán juntos y nombrarán los cuatro consejos que aprendieron para sanar amistades rotas. Esto será la llave para el “portón” de la ciudad.
Haz una acción que muestre un consejo para sanar una relación rota. Pide a los niños que nombren el consejo. Cuando un niño acierte, permite que suelte su brazo del niño que tiene al lado. Haz esto con cada consejo, pero no lo hagas en orden. Una vez que se hayan nombrado los cuatro consejos, felicítalos por abrir el portón de la ciudad.
Opcional: Si usas las Páginas del Alumno, dales 5 minutos para que corten y ordenen las piezas del rompecabezas. Anímalos a juntar las piezas del rompecabezas en sus hogares.
Tristemente, uno de tus amigos no está dispuesto a hacer algo para sanar la amistad. Cuando esto sucede, es importante que seas amable con quien era tu amigo. La Biblia dice:
Hagan todo lo posible por vivir en paz con todo el mundo.
Romanos 12:18
Dios quiere que vivas en paz con los demás, tanto como sea posible. Esto incluye a los amigos que ya no son más parte de nuestras vidas.
Cuando has intentado todo lo que puedes para sanar la amistad, ora y deja la amistad en las manos de Dios. Has hecho todo lo que puedes para estar en paz con ese amigo. Cuando las amistades no se pueden arreglar, puedes confiarle a Dios cualquier dolor que sientas.
A veces, los buenos amigos no se llevan bien. Cuando algo sucede con tu amigo será fácil para ti enojarte, hacer algo que lastime a tu amigo o tratar de evitarlo o ignorarlo. Este comportamiento no ayudará a tu amistad. En vez de actuar de esta forma, debes detenerte y tratar de solucionar el problema de inmediato. Detente, ora, escucha, permanece calmado, listo para perdonar.
Haz que los niños se junten en parejas para la siguiente actividad. Si tienes grupos de 3 niños, pídeles que tomen turnos para representar las situaciones.
En un momento, usarás los consejos que aprendimos hoy para representar algunas situaciones. Para cada una de ellas, identifica los consejos que puedes usar para sanar la amistad rota. Leeré cada situación en voz alta. Tú y tu compañero actuarán la solución al problema.
Escoge 2 de las siguientes situaciones para que los niños las representen. Si hay tiempo, puedes hacer que actúen todas las situaciones. Léeles una situación a la vez. En cada una de ellas la amistad está rota. Los niños actuarán sobre qué pueden hacer los amigos para sanar la amistad. Ambos amigos necesitan ayuda para sanar la amistad. La mayoría del tiempo, hay pasos que los dos pueden dar. Dales 2 minutos para hacer la representación.
Situación 1: Marcela y Paula son buenas amigas. Se cuentan todo, incluyendo las cosas que no quieren que sepan los demás. Marcela le contó a Paula algo escalofriante que le sucedió en su casa. Un día, Marcela descubrió que Paula le había contado a las demás niñas lo que le sucedió. Esto la enojó. ¿De qué forma Marcela puede ser una buena amiga con Paula?
Situación 2: Fabiola y Rocío han sido amigas desde que son muy pequeñas. Ahora que están más grandes, Rocío siempre escoge qué actividades o juegos harán con su grupo de amigos. Si no puede elegir lo que harán, se sienta en el piso y no juega con Fabiola. ¿De qué manera Fabiola puede ser una buena amiga con Rocío?
Situación 3: Mario y Claudio a menudo juegan a las luchas para divertirse. Las últimas veces que lo hicieron, Claudio salió lastimado porque Mario no se detiene cuando se lo pide. Parece que Mario disfruta sentirse más fuerte y lastimar a Claudio. ¿Cómo puede Claudio ser un buen amigo para Mario?
Todos hicieron un muy buen trabajo demostrando cómo sanarían una amistad rota. Recuerda que Dios quiere ayudarte con tus amistades. En silencio, piensa por un momento en tus amigos. Piensa si hay alguna amistad que necesita sanidad.
Toma una pausa por un momento para que los niños piensen en sus amistades.
Si pensaste en una amistad que necesita sanidad, pide a Dios que te ayude a sanarla. Diré una oración y haré una pausa después de cada oración. Puedes decir la oración en silencio cuando yo hago la pausa.
Dios, por favor, ayúdame a sanar mi amistad. (Pausa)
Muéstrame qué puedo hacer para ser un buen amigo. (Pausa)
Muéstrame si he lastimado a mi amigo. (Pausa)
Gracias por preocuparte por mis amistades. (Pausa)
En el nombre de Jesús, amén.
Si utilizas el Cartel del Versículo para Memorizar, muéstralo a los niños.
Ahora, revisemos nuestro versículo para memorizar.
En todo tiempo ama el amigo; para ayudar en la adversidad nació el hermano.
Proverbios 17:17
Canta o recita el versículo usando la misma melodía o ritmo de la última vez. Si no estabas presente durante la clase pasada o no te acuerdas de cómo era la canción, pide a los niños que se ayuden. Repite 3 veces las palabras del versículo de memoria.
Finaliza la clase diciendo esta bendición por los niños, basada en Mateo 5:23–24.
Bendición: Que tengas la valentía para admitir cuando algo anda mal entre tú y un amigo. Que Dios te ayude a resolver lo que está mal y fortalezca tu amistad de nuevo.
Si tienes tiempo, comparte esta canción con los niños:
Copyright: VIDA POR VIDA © 2021 DAVID C COOK. SE PERMITE LA REPRODUCCIÓN SOLO PARA SER USADA EN EL AULA. TODOS LOS DEMÁS USOS REQUIEREN AUTORIZACIÓN POR ESCRITO. SOLICÍTELO POR CORREO ELECTRÓNICO A [email protected]. TODOS LOS DERECHOS RESERVADOS.